Parece que la realización de barridos periódicos en las sedes gubernamentales canarias es habitual, lo que nos llena de zozobra y nos hace pensar si no será que alguien quiere que se cree la Guanchancha de modo inmediato, con su correspondiente sección de espionaje y contraespionaje. El caso es que las escuchas siguen siendo preocupación del Gobierno de Adán Martín, que también ha mandado hacer un barrido en su despacho y en su residencia oficial. No conocemos el resultado de tales indagaciones, pero sí que Presidencia ha decidido hacerse con los servicios de una empresa catalana, Compañía Europea de Seguridad (CES), que apenas presta servicios aquí. Esa contratación ha causado el correspondiente mosqueo entre las empresas del sector en las Islas, que aseguran contar con experiencia y material suficiente para hacerse cargo de un servicio tan delicado como ése.