Nos escribe con mucha corrección el responsable de la Oficina de Información del Opus Dei en Las Palmas, José Luis Mota, para indicarnos que la Obra “no se mete en negocios de aerogeneradores o molinillos de megavatios” como les llamamos este jueves con mucha mala uva en esta misma sección. Afirma el portavoz que “esta institución de la Iglesia católica tiene sólo fines espirituales y de difusión de la doctrina cristiana” y que “si alguna persona, además de ser del Opus Dei, quiere optar al megavatio ¡allá él!. ” Efectivamente, amigo Mota, fuimos bastante imprecisos al involucrar directamente a la Obra en el negocio de los megavatios cuando debimos decir, por obligada concreción, que se trata de destacadas personas que, además de aplicarse al negocio eólico, son miembros del Opus Dei. En ningún caso hemos querido insinuar que el viento y los fines espirituales de esta institución sean incompatibles. Muy al contrario, cuanto más y mejor soplen vientos de redención y santidad, mejor para sus fines.