Las dos horas del acto dieron para alguna lasca informativa. Por ejemplo, la primera gran ausencia: la del PSOE. Ni un solo miembro de sus direcciones regional e insular. ¿Dónde estaban? ¿Ya de vacaciones? Porque el PSOE es el único partido superviviente de aquel 3 de abril de 1979. Menos mal que Pepe Segura, José Vicente González y Domingo Medina se dejaron caer por allí, que si no? Otras ausencias sonadas: las de José Manuel Soria y José Luis Perestelo, presidentes de los cabildos de Gran Canaria y La Palma, respectivamente. A falta de ambos, pues hubo de ser Ricardo Melchior, su colega de Tenerife, quien aguantara el envite de Adán Martín en su discurso, a propósito de la financiación de las haciendas locales. Pero hubo más?