Les rogamos que se vuelvan a leer la respuesta porque es más difícil expresarse así que hacerlo con un mínimo de coherencia intelectual, la exigible a cualquier persona con el Graduado Escolar y con un cargo público. Pero, veamos. Si “tenemos que diversificarnos” de nuestros dos mercados (Reino Unido y Alemania) e ir a su vez hacia “los países donde está evolucionando mejor su (sic) economía, como son Alemania y Francia”, debemos concluir que la diversificación ha de dirigirse a Francia. Entonces, ¿por qué salta la doña al “mercado nórdico” para, a mitad de camino, acordarse de que “el problema es la devaluación de la libra”? Debe ser que con tanta crisis y tanto trasiego en la UE, Noruega ha adoptado la libra esterlina y nosotros no nos hemos enterado. O puede ser que la consejera quisiera volver al Reino Unido para hablarnos una vez más de la necesidad de diversificar. Pero no se refiere en esta segunda vuelta a diversificar mercados, sino segmentos socioeconómicos, porque a partir de ese momento empieza a hablar de “turismo británico de mayor poder adquisitivo”. Si habla así, imagínense cómo ordena las ideas con las que sacarnos de la crisis. Si es que tiene alguna.