Sabedor de que algunos de sus interlocutores empresariales ven con buenos ojos desalojar del poder a Coalición Canaria, y más concretamente a Paulino Rivero, Soria se extendió serenamente sobre esa propuesta de pacto entre el PP y el PSOE, un mantra que ya repite por las esquinas todo quisque popular hasta ver si cala. Entre los atentos interlocutores que este lunes comentaron esa jugada con Soria en la Confederación de Empresarios se encontraba el histórico socialista Salvador García Carrillo, al que Paulino Rivero le importa exactamente una higa si no fuera porque en el lote que promete el presidente del PP canario podría ir incluido el secretario general del PSOE, José Miguel Pérez. Al líder socialista canario se la tiene jurada este viejo rockero, hoy próspero empresario de las academias de formación, desde que en 2007 se produjo la crisis municipal en el grupo socialista de Telde y su hija, Teresa García, fue despojada de todos los atributos como concejala de gobierno. García Carrillo, junto a otros militantes como Luis Monterrey, preparan una candidatura que pueda concurrir al próximo congreso regional socialista. Dicen que ya tienen el nombre de su candidato a secretario general, pero que no lo sueltan para no quemarlo, y que no es García Carrillo. Hasta ahora, eso sí, no se han pronunciado abiertamente a favor de esa propuesta de Gobierno canario de salvación que promueve José Manuel Soria.