El consejero de Cultura y Turismo, Gonzalo Santonja (Vox), ha negado que tras la ruptura entre PP y Vox en julio de 2024 él haya sido el único consejero de esta última formación que sigue en el gobierno autonómico debido a algún 'peaje': “no tengo ninguna factura con nadie”, ha afirmado este lunes.
“Me he metido en la consejería sin necesitarlo y estoy aquí por un compromiso ético y profesional con el patrimonio. Mis obligaciones son las que asumí al jurar el cargo (abril de 2022): son esas y no admito ninguna otra”, ha respondido al parlamentario de Vox Miguel Suárez.
Por dos veces, al principio y al final de su intervención en la comisión de Economía y Hacienda, Miguel Suárez le ha preguntado a Santonja por el coste de la “factura” que le permite “tener las posaderas” en el cargo de consejero. Tras reprochar al parlamentario de Vox un lenguaje “más propio de la taberna” que de un parlamento, el consejero ha insistido: “Ni me he planteado facturas ni las admito”.
Relación con Mañueco
La relación personal entre Santonja y el presidente de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco (PP), “se acentuó con la crisis del Archivo de Salamanca, de donde se extrajeron indebidamente muchos documentos y se rompió un archivo estatal; allí estuvimos él y yo dando la cara y lo pagamos caro”, ha recordado veinte años después.
“No he tenido ninguna situación difícil ni con el gobierno de coalición (PP-Vox) ni después”, ha proseguido Santonja quien al dirigirse a Miguel Suárez le ha manifestado su extrañeza por el tono empleado: “No entiendo su hostilidad, la consejería se sigue rigiendo por los mismos parámetros”.
El consejero ha comparecido este martes por la mañana ante la comisión de Economía y Hacienda de las Cortes de Castilla y León para explicar y pormenorizar el proyecto de Presupuestos Generales de la Comunidad para 2026 en su departamento (Cultura, Turismo y Deporte), dotado de 221,8 millones, un 3,8 por ciento más, pendiente de debate en el parlamento autonómico.
El PSOE rechaza un proyecto “cicatero, escuálido e impotente”
El proyecto de presupuestos de la Consejería de Cultura y Turismo para 2026 es “cicatero, escuálido e impotente” a juicio del parlamentario socialista José Ignacio Martín Benito, quien ha acusado al gobierno autonómico de que “sólo vende humo”. “¿Qué fue del libre acceso digital a los documentos de los archivos provinciales que se dilata en el tiempo? ¿Qué fue del Plan del Lectura desde que en 2020 caducó el anterior?, ha preguntado el portavoz socialista al consejero de Cultura y Turismo, Gonzalo Santonja.
Martín Benito cree que “no hay voluntad” en la Junta de Castilla y León y ha puesto como ejemplo el incumplimiento de los compromisos adquiridos en las Cortes que, en su opinión, “han quedado destrozados” en lo que a la cultura, turismo y deporte se refiere. “Hace falta otro modelo presupuestario y un cambio político en la Junta de Castilla y León”, ha concluido.
El procurador no adscrito Francisco Igea ha responsabilizado al gobierno autonómico de haber convertido durante los últimos años a los Premios Castilla y León “en un factor de riesgo en vez de una celebración”, hasta el punto de que “la gente ya no va” por su carácter “sectario y de clientelismo”, ha precisado.
Igea ha centrado sus críticas en la escasa ejecución presupuestaria del pasado ejercicio, y en el declive del turismo rural en una comunidad que habitualmente es líder de estancias y pernoctaciones. El turismo rural en Castilla y León “está plano total, menos visitantes y pernoctaciones el pasado agosto en relación con 2019”, ha anotado Igea durante una intervención en la que ha criticado el acuerdo para la declaración BIC del Toro Jubilo en Medinaceli (Soria): “prender fuego en las astas de un animal”, ha lamentado.
Por último, ha defendido el nombre de Valentín Garrido, represaliado durante la guerra civil, “por defender los valores democráticos”, ha apostillado, para las instalaciones deportivas Llano Alto en Béjar (Salamanca) que promovió cuando fue concejal y que, en caso de ser aprobados estos presupuestos, serán reformadas con 800.000 euros en 2026.