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El Govern anuncia concesiones a los docentes en la segunda jornada de huelga

Pau Rodríguez

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El Govern ha hecho las primeras concesiones ante el profesorado coincidiendo con la segunda jornada de huelga en el sector, y después de que el martes decenas de miles de docentes llenasen las calles de Barcelona. El consejero de Educación, Josep González-Cambray, ha comparecido de urgencia para anunciar que los centros educativos no estarán obligados a aplicar el nuevo currículum el curso que viene, una de las razones que motiva la protesta. 

“Entendemos el trasiego que supone el nuevo currículum en los centros educativos. Las escuelas que lo crean oportuno podrán no hacer cambios el próximo curso”, ha expresado Cambray. Esta es una moratoria que ofrece el consejero para aplacar las quejas del profesorado pero que no está prevista en la LOMLOE, la legislación estatal que regula la aplicación del nuevo temario (del que la Generalitat solo es responsable de diseñar una parte). 

La implementación de los currículums, según la LOMLOE, está prevista para los cursos impares en 2022-2023 y para los pares, en 2023-2024. Aun así, Cambray ha asegurado que pueden garantizar cierta “progresividad” y “flexibilidad” a aquellas escuelas e institutos que crean que no tienen margen para aplicarlo a partir del próximo mes de septiembre. 

En su rueda de prensa, Cambray ha asegurado que no se plantea dimitir y ha insistido en que durante esta legislatura se han comenzado a satisfacer algunas de las reivindicaciones del profesorado. Entre ellas, la rebaja de las ratios a 20 alumnos por clase –se empieza el curso que viene en Primero de Infantil– o la reducción de la interinidad de las plantillas. “Hemos comenzado a revertir los recortes”, ha dicho.

Asimismo, ha minimizado el seguimiento de una huelga que por ahora los sindicatos han calificado de histórica. “La mayoría de profesores fueron a la escuela”, ha afirmado. Según datos de Educación, el seguimiento del paro el martes en los centros públicos fue del 33% y este miércoles, del 14% (en la concertada, del 7%). Los sindicatos, que convocaron la movilización de forma unitaria, elevaban sin embargo la cifra a un 60% y un 75% en Secundaria. Y en esta segunda jornada la sitúan en el 45%.

Los representantes del comité de huelga, que este miércoles han participado en una nueva manifestación en la capital catalana, ya han dejado claro que rechazan la propuesta sobre el currículum. De entrada, por el hecho de haberse producido en un anuncio a la prensa y no en un encuentro con ellos, teniendo en cuenta que se reunieron hace 24 horas. “Estas no son formas de trabajar, no se improvisan medidas así de importantes”, ha manifestado Teresa Esperabé, de CCOO, que ha pedido una “moratoria para debatir con tranquilidad” el temario. Iolanda Segura, de USTEC, ha asegurado que esta es una muestra de que a Cambray le ha faltado “voluntad” para negociar y que quieren ver propuestas como esta para “cada una” de sus demandas.

Entre las principales demandas de los sindicatos están la rebaja de ratios, el aumento de la inversión en educación al 6% del PIB o el mantenimiento del modelo de inmersión lingüística en catalán. Pero sobre todo la más controvertida es la que afecta a la modificación del calendario escolar, que Cambray quiso adelantar una semana en septiembre (a cambio de hacer todo el mes de jornada lectiva intensiva). En este aspecto, el consejero no ha dado su brazo a torcer y ha insistido en que es una iniciativa positiva a nivel pedagógico y de conciliación familiar. 

En la segunda jornada de huelga, una cincuentena de docentes han irrumpido en el Salón de la Enseñanza para boicotear la intervención del consejero. Los manifestantes han accedido al recinto por la puerta de acceso principal con pancartas y silbatos. Entre las principales proclamas estaban la petición de dimisión del conseller y la exigencia de que el presidente de la Generalitat, Pere Aragonès, intervenga en el conflicto.