Natillas con naranja: por qué es una buena idea añadir un toque cítrico y aromático a este postre clásico

Elena Segura

6 de noviembre de 2025 11:33 h

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Las natillas son uno de esos postres de toda la vida. Todo un clásico de cuchara para terminar una comida o una cena con un toque dulce. Con una receta muy sencilla y unos ingredientes muy básicos (leche, huevo, maicena, canela, vainilla, azúcar y ralladura de limón), preparar unas natillas está al alcance de todo el mundo. Si te apetece degustar este postre, te aconsejamos que te animes a prepararlo en casa. De esta forma podrás adaptar la receta según tus preferencias y consumir una versión más saludable que algunas alternativas industriales.

Además de las natillas clásicas, hay un sinfín de variedades de este postre, que podemos cocinar más o menos espeso, aromatizado con canela y vainilla o sin ellas, con o sin galleta para coronar el resultado, de chocolate, veganas, sin lactosa, e incluso de pistacho o como estas que te proponemos, con cítricos como la naranja. Además de ser un postre por sí mismo, las natillas también podemos encontrarlas en otras preparaciones como en la popular tarta de la abuela.

La receta clásica

Uno de los secretos para tener éxito en una receta tan sencilla es, por una parte, escoger unos ingredientes de buena calidad, y, por otra, no tener prisa a la hora de preparar el postre, cocerlo a fuego lento, dándole tiempo para que todos los ingredientes se integren a la perfección y consigamos la textura, aroma y sabor deseados. Para hacer unas natillas básicas de toda la vida necesitarás una media hora y, para cuatro personas, los siguientes ingredientes:

  • Medio litro de leche: puede ser con o sin lactosa o incluso escoger una bebida vegetal
  • Una rama de canela
  • Una vaina de vainilla
  • La ralladura de un limón: evita la parte blanca de la piel porque amarga el resultado
  • 4 yemas de huevo
  • Unos 75 gramos de azúcar
  • Una cucharada de maicena

Lo primero que vamos a hacer es aromatizar la leche. Para ello, la calentaremos en cazo hasta llevarla a ebullición junto a la rama de canela, la vaina abierta de la vainilla y la ralladura del limón. Una vez haya hervido, apagamos el fuego y dejamos reposar todo junto durante 15 o 20 minutos y colamos.

Seguidamente, batiremos los huevos junto con el azúcar y la maicena, y cuando esté todo bien integrado vamos añadiendo la leche poco a poco. Podemos mezclar todo con unas varillas. Cuando la masa sea lo suficientemente homogénea, la calentaremos en un recipiente apto al baño maría durante unos 10 o 15 minutos hasta que vaya espesando, iremos removiendo para evitar que se pegue. El agua no debe hervir. Recuerda que al enfriarse, las natillas espesarán algo más. Ahora puedes repartir la mezcla en pequeños vasitos o cazuelas y, si lo deseas, decorar las natillas con una galleta. Antes de consumirlas, debes dejarlas enfriar por unas horas en la nevera.

La versión cítrica

Si tienes una buena cantidad de naranjas en casa y no sabes qué hacer con ellas, te proponemos esta versión menos clásica pero igualmente deliciosa de las natillas. Vamos a sustituir la leche por el zumo de esta fruta. El tiempo de preparación, y el procedimiento, es el mismo que en la receta anterior. Estos son los ingredientes para cuatro comensales:

  • Medio litro de zumo de naranja
  • Una rama de canela
  • Piel de naranja
  • 4 yemas de huevo
  • Entre 75 y 90 gramos de azúcar, en función de lo dulce que quieras que quede el postre
  • 20 gramos de maicena

En este caso, en lugar de calentar la leche con los ingredientes que nos servirán para aromatizar la receta, lo que haremos será llevar a ebullición el zumo de naranja junto con la piel de naranja y la canela. Dejaremos reposar, igualmente, entre 15 y 20 minutos. Y seguidamente batiremos, como en la ocasión anterior, las yemas de huevo con el azúcar y la maicena. Y después integramos con el zumo de naranja (previamente colado) pero muy poco a poco para evitar que se cuajen las yemas. Devolvemos toda la mezcla a un cazo y calentamos a fuego muy bajo removiendo constantemente para evitar que se pegue.

Ahora sí, una vez conseguida la textura deseada, lo repartimos en los recipientes que hayamos escogido y llevamos a la nevera para que siga espesando mientas enfría.

Una alternativa vegana: de naranja y coco

Si eres vegano, o intolerante al huevo, no tienes por qué quedarte sin tu postre de natillas cítricas. Hay una forma de prepararlas y que queden igualmente muy ricas. Esta vez los ingredientes sí que son más variados, e incluyen frutos secos. Este el listado para cuatro comensales:

  • 100 gramos de frutos secos: por ejemplo, nueces y anacardos
  • Una lata de leche de coco
  • Una cucharada de postre de esencia de vainilla
  • Una cucharadita de postre de canela
  • Una naranja, su zumo y la piel
  • Para endulzar, sirope de agave o arce al gusto
  • Unas cuatro cucharadas de maicena

El primer paso es hervir agua y dejar a remojo los frutos secos al menos durante media hora. Seguidamente, pasaremos por un procesador de alimentos las nueces y anacardos junto a la leche de coco, el sirope y la esencia de vainilla hasta conseguir una mezcla homogénea.

El siguiente paso será calentar en un cazo el zumo de naranja con su piel y la maicena, hay que remover constantemente para evitar que se pegue y que se formen grumos. Sabremos que está en su punto cuando comience a espesar. En ese momento añadimos la crema de leche coco y frutos secos y seguimos removiendo hasta que veamos que tiene una buena consistencia. Repartimos en recipientes y reservamos unas horas en la nevera antes de servir.