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Javier Fernández califica la dimisión de su consejera de “doctrina genuina” del PSOE asturiano

El presidente de Asturias, el socialista Javier Fernández, ha roto el silencio mantenido durante todo el proceso en el que se vio involucrada su consejera de Bienestar Social, Esther Díaz, que el lunes renunció a su cargo tras despatarse una serie de adjudicaciones a la empresa de su marido. En concreto, Díaz participa con un 19,8% en la compañía de su conyuge. Los grupos de la oposición parlamentario aprovecharon esta ausencia para elevar las críticas al jefe del ejecutivo autonómico y sembrar la duda ante “su silencio atronador”.

Fernández ha salido en rueda de prensa para defender la dignidad de su consejera y visualizar el listón que están poniendo los socialistas asturianos. “Se trata de una doctrina genuina de Asturias” y deja caer que “ahora, que miren dónde estamos colocando el nivel de exigencia en el Partido Socialista”.

El líder socialista asegura que no hubo presión por parte del Gobierno para que la consejera renunciara a su cargo. “Yo no le pedí nada. Ella quiso dar la cara”, dice y asegura que “dimite porque no está dispuesta a asumir más el deterioro de su dignidad profesional y familiar, no por ocultar algo ni por haber vulnerado la legalidad”.

La consejera, que asistió al Consejo de Gobierno, anunció durante su comparecencia en la Junta General del Principado su “renuncia inmediata” para cerrar el chorreo de noticias sobre la actividad de la empresa de su marido, Davelco S.A. El presidente no habló hasta ahora y lo hizo en el contexto en el que su gobierno alcanzó un acuerdo con el PP para aprobar las cuentas de 2015.

Javier Fernández cierra, en un mismo acto, de cara a la opinión pública, dos cuestiones que han servido de crítica para la oposición: las dimisiones, en menos de una semana, de la consejera y del director general de Administración Local y el inédito pacto presupuestario con el PP, que ha dejado fuera de juego de la negociación al resto de los partidos, principalmente IU y UPyD.

“Hay que saber convivir con la decepción. Este gobierno tiene diecisiete diputados y hay que negociar. Las cosas no salen redondas y tienes que hacer concesiones”, ha dicho en defensa de un acuerdo que, a su juicio, sólo se hizo pensando en Asturias, sin teorías de la conspiración de por medio de cara al resultado electoral de mayo.

Tras hacerse oficial el acuerdo, sus antiguos socios, IU y UPyD, vieron en él, una estrategia de futuro para mantener el bipartidismo. “El PP es mi adversario político y el acuerdo no va más allá de este ámbito”, asegura. En este sentido, no entiende porque resulta tan sorprendente, sobre todo a IU, al que recuerda que tiene un acuerdo de Gobierno con el presidente Monago (PP) en Extremadura y con el alcalde, también del PP, en Oviedo.

El Gobierno asturiano, que espera aprobar el presupuesto el 29 de diciembre, presenta unas cuentas de 3.955,6 millones de euros, un 1,2% de aumento. Como novedades se incorporan una reducción fiscal en el tramo autonómico de dos puntos del IRPF; deducciones fiscales por la compra de libros y material escolar, con un limite de entre 50 y 100 euros por hijo, y de hasta 330 euros por niño de gastos derivados de las escuelas de 0 a 3.

El presidente de Asturias, el socialista Javier Fernández, ha roto el silencio mantenido durante todo el proceso en el que se vio involucrada su consejera de Bienestar Social, Esther Díaz, que el lunes renunció a su cargo tras despatarse una serie de adjudicaciones a la empresa de su marido. En concreto, Díaz participa con un 19,8% en la compañía de su conyuge. Los grupos de la oposición parlamentario aprovecharon esta ausencia para elevar las críticas al jefe del ejecutivo autonómico y sembrar la duda ante “su silencio atronador”.

Fernández ha salido en rueda de prensa para defender la dignidad de su consejera y visualizar el listón que están poniendo los socialistas asturianos. “Se trata de una doctrina genuina de Asturias” y deja caer que “ahora, que miren dónde estamos colocando el nivel de exigencia en el Partido Socialista”.