La comercializadora de energía Bulb Energy ha quebrado en el Reino Unido y será sometida a un proceso de administración especial para gestionar las consecuencias del mayor colapso del suministro de energía jamás registrado, según ha anunciado la compañía en un comunicado.
El regulador británico de la energía elaboró durante el fin de semana planes para someter a la empresa a un proceso de administración especial destinado a proteger a los 1,7 millones de clientes domésticos que Bulb tiene en este país, según ha informado THe Guardian.
La compañía asegura en un comunicado que de momento los negocios que tiene fuera del Reino Unido, entre los que se encuentra España, no se verán afectados por la situación de la matriz: “Nuestros negocios internacionales en Francia, España y Texas seguirán operando. Son negocios separados de Bulb UK y no se ven afectados inmediatamente por nuestra entrada en administración especial en el Reino Unido”. España fue el primer país al que llegó Bulb en su expansión comercial con su lanzamiento en julio de 2020. Entonces señaló que contaba con unos 3.500 clientes en España.
“La administración especial está diseñada para proteger a los clientes de un gran proveedor de energía que se ha vuelto insolvente. El administrador especial está obligado por el Gobierno, en virtud de la Ley de Energía de 2011, a seguir suministrando energía a los clientes, y protegerá los saldos acreedores de los clientes. El proceso de nombramiento de los administradores especiales aún no ha concluido, pero esperamos que lo hagan en breve”, explica la compañía.
La quiebra de la empresa era esperada desde hace tiempo por los rivales del sector, según publica The Guardian, que la calificaron de “muerto viviente”, después de que intentara durante meses encontrar nuevos inversores o un comprador, antes de la inminente crisis energética invernal en el Reino Unido.
El aumento récord de las facturas de energía ha provocado la quiebra de 21 proveedores en el Reino Unido desde principios de septiembre, lo que ha obligado al regulador a encontrar un nuevo proveedor que se haga cargo de más de 2 millones de clientes. Con la caída de Bulb ya serán 3,7 millones los clientes afectados por loes elevados precios de la energía en el Reino Unido.