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La Xunta participó con alegaciones en el plan de la eólica marina que ahora Rueda dice que desconocía

La vicepresidenta tercera, Teresa Ribera, y el presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, tras la reunión de noviembre de 2022.

Beatriz Muñoz

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En septiembre de 2021 la Xunta remitió al Ministerio para la Transición Ecológica sus alegaciones para la evaluación ambiental de la eólica marina y meses después, ya en 2022 y con Alfonso Rueda al frente del Gobierno gallego, envió también sus respuestas a las preguntas sobre el marco normativo para estos proyectos. Tras aprobarse esta misma semana el plan definitivo del Gobierno central, sin embargo, el presidente gallego criticó que su equipo no había podido participar en la elaboración: “Si nos hubieran preguntado, habríamos dado nuestra opinión”.

En sus aportaciones para los planes de ordenación del espacio marítimo (POEM), el Gobierno gallego pidió identificar zonas habituales de paso de aves migratorias en la costa y también que la tramitación administrativa de los parques en el mar fuese más simple.

A esos documentos remitidos por la Xunta se suman 10 reuniones con el Gobierno central, algunas en presencia de otras comunidades y otras, bilaterales para abordar la eólica marina, recordó el delegado del Gobierno en Galicia, José Miñones. En noviembre de 2022 Rueda y la vicepresidenta tercera y ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, mantuvieron un encuentro en el que estos proyectos estuvieron también sobre la mesa. Informó de ello la propia Xunta en un comunicado para los medios de comunicación, en el que aseguraba que el presidente gallego trasladó la “disposición” de Galicia para convertirse en “un referente nacional” en esta energía y la petición al Ejecutivo estatal de que se implicase de forma “más intensa con la tramitación del marco normativo”.

Entonces, según la Xunta, el compromiso de Teresa Ribera fue que estaría aprobado antes de que terminase 2022. Los dos meses de demora fueron objeto de crítica por parte de Rueda, que dijo que el plan llega “con retraso”. También delineó una postura combativa: “El Gobierno gallego no autorizará ningún parque eólico marino que ponga en riesgo los recursos pesqueros”. La competencia sobre costas corresponde al Estado.

El delegado del Gobierno en Galicia replicó a Rueda pidiéndole “responsabilidad”. “Decía el presidente que está sorprendido y a este Gobierno lo que le sorprende y le preocupa es esa memoria selectiva de Rueda”, dijo. Añadió que el desarrollo de la eólica marina es “una oportunidad” y el Ejecutivo central “tiene muy clara la línea de trabajo”: no se aprobarán parques a menos de 21 kilómetros de la costa. Los POEM son “una ordenación” y cada proyecto “ahora requerirá del consenso y de la aprobación”, manifestó.

Rueda volvió a insistir este miércoles en su postura y afeó que la Xunta “no conoce otra cosa” que la información difundida tras el Consejo de Ministros, que incluye mapas con las zonas en las que se abre la posibilidad de instalar aerogeneradores. “Habrá que ver si la delimitación coincide o no coincide, y en qué parte, con lo que se dijo desde aquí”, señaló. Sin embargo, a renglón seguido concluyó que las aportaciones del observatorio creado por el Gobierno gallego con el sector pesquero “no fueron tenidas en cuenta en absoluto”.

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