La jornada 'El puerto: motor económico de Balears', una iniciativa de la Autoritat Portuaria de Balears (APB) organizada por elDiario.es, ha arrancado este miércoles con una mesa redonda en la que se ha puesto en valor el papel de los puertos de Balears como ejes de la cadena de suministro y de la coordinación necesaria para garantizar el abastecimiento de las islas. No en vano, el 99% de los bienes de consumo que importa el archipiélago entra por sus cinco puertos de interés general, una cifra que, ha subrayado el director de la APB, Toni Ginard, se sitúa por encima de los porcentajes que manejan otras instalaciones portuarias de España.
“Se trata de un motor quizás un poco silencioso”, ha manifestado Ginard durante la mesa 'El servicio de mercancías: precisión logística en la cadena de suministro', en la que también han participado el secretario general de la Asociación Española de Grandes Empresas de Distribución (ANGED), Marcos Casado; el representante de la Asociación de Navieros Españoles (ANAVE), Joan Serra, y el de los estibadores de la Asociación Patronal de Empresarios de Actividades Marítimas (APEAM), Antonio Gómez. La mesa ha sido moderada por Pablo Sierra del Sol, periodista colaborador de elDiario.es en Eivissa y Formentera.
En su intervención, Ginard ha manifestado que los puertos de Balears reciben 17 millones de toneladas de mercancías cada año. “Creo que no somos conscientes de esta magnitud”, ha afirmado, para acto seguido recalcar la importancia de dar mayor visibilidad a todas sus actividades. “Los ciudadanos desconocemos lo que se hace en nuestros puertos. Somos uno de los motores de la economía balear y somos un territorio en el que tenemos industria, comercio, zonas abiertas que el ciudadano puede disfrutar. Quizás solo somos conocidos porque somos los que abastecemos de mercancías al territorio y garantizamos la conectividad de los pasajeros por mar. Pero, como decía, en ningún caso creo que se conoce la verdadera magnitud de lo que hacemos”, ha incidido. “Es como una microsociedad. Cada puerto es el universo”, ha añadido.
Por su parte, Casado ha apelado a la necesidad de que la sociedad sea consciente de que la distribución minorista (retail) es “motor y fuente de abastecimiento de los consumidores”. Como responsable de ANGED, ha destacado que esta entidad nació en 1977 con el objetivo de dar voz a este sector, que engloba desde grandes almacenes y supermercados a las grandes tiendas especializadas en moda, electrodomésticos y muebles. “En un territorio como son las islas, el transporte marítimo de mercancías es absolutamente vital”, ha subrayado, reflexionando acto seguido sobre unas infraestructuras “estratégicas”, pero también “críticas”, que, considera, “hay que dotar de medios”.
Casado ha apelado, asimismo, a la necesidad de que las autoridades se coordinen para controlar el comercio online, que es “tan lícito como el comercio físico”: “Pero sí es cierto que estamos viviendo un auge de ese comercio procedente fundamentalmente de plataformas chinas que llevan a cabo prácticas desleales, introduciendo en el mercado de la Unión Europea productos y servicios que no cumplen con la normativa”. Por ello, ha señalado que el Parlamento Europeo “se ha preocupado por esta falta de legislación” y se ha pronunciado “para que las reglas sean exactamente iguales para todos los operadores en la UE”.
En concreto, ANGED está integrada por 23 de las más importantes firmas del retail en España, con más de 7.400 tiendas, una facturación superior a 48.000 millones de euros y 236.000 empleados. Las compras a proveedores españoles ascienden, además, a los 35.400 millones de euros anuales, con una inversión media anual superior a los 1.000 millones durante los últimos 15 años y una aportación social y tributaria que supera los 13.000 millones de euros anuales.
Por su parte, Serra ha considerado: “A veces no nos damos cuenta de la importancia que tiene una buena conectividad marítima hasta que ocurren las catástrofes y, entonces, es donde aparecemos nosotros también. A base de trabajo, de inversión y de innovación, hemos conseguido adaptar la flota que presta servicios marítimos, conectando el territorio balear con unos barcos adaptados a la sostenibilidad que cumplen con las necesidades de las demandas de los clientes y de toda la gama, diríamos, de necesidades de abastecimiento que tienen las islas, que son muchas y variadas, desde el producto perecedero o frío hasta los materiales de construcción”.
El representante de la Asociación de Navieros Españoles ha subrayado cómo durante los últimos 20 años se ha realizado un esfuerzo considerable en la mejora y la seguridad de estos barcos, con el objetivo de “dar fiabilidad en el servicio marítimo y a la vez una puntualidad que facilite la labor de las grandes superficies y del pequeño comercio que tanto depende del suministro marítimo”.
En esta línea, ha apuntado, como el resto de intervinientes, que el 90% del consumo procede de la península, por lo que la asociación se preocupa de que “llegue en tiempo y forma a los lineales de los supermercados o a los pequeños comercios”. “Esto requiere un trabajo importante. Gracias al esfuerzo y a esa buena conectividad , el estocaje de productos alimenticios que los grandes almacenes hacían antaño haya pasado prácticamente a la historia”, afirma.
Mientras tanto, Gómez ha ensalzado la importancia del ámbito de los estibadores, dado que la mayor parte de la mercancía se distribuye a través de camiones con conductor. En este sentido, ha aludido a varias de las problemáticas que afectan al sector, como la falta de colegios profesionales y “algunas causas judiciales que quieren computar como tiempo de trabajo el tiempo de embarque”, lo que, señala, provoca que “cada vez empiece a llegar una mercancía o más camiones y conductores sin cabezas tractoras”. Gómez ha manifestado que están intentando rejuvenecer la plantilla de estibadores, al tratarse de un oficio en el que “cuesta encontrar relevo generacional”.
Ginard, de nuevo, ha destacado que la APB lleva a cabo numerosas iniciativas de mejora de sus insfraestructuras para la recepción de mercancías y que suponen una inversión de entre 40 y 60 millones de euros que, ha apostillado, proceden de los recursos propios del organismo. Uno de los proyectos busca mitigar el cambio climático en lo que respecta a la subida del nivel del mar y las consecuencias de los temporales con el objetivo de que estos no afecten a la descarga de mercancías. También prevé destinar cerca de 100 millones de euros en electrificar los muelles. Y se centrarán también en convertir las estaciones marítimas en estaciones sostenibles, además de seguir trabajando por alejar las actividades de descarga de mercancías del nucleo urbano.