Corina Machado, premio Nobel de la Paz, justifica las amenazas de EEUU a su país: “Venezuela ya ha sido invadida”

EFE

11 de diciembre de 2025 11:25 h

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“Algunos hablan de la amenaza de una invasión en Venezuela [por parte de EEUU]. Venezuela ya ha sido invadida por agentes rusos, iraníes, grupos terroristas como Hamás y Hizbulá que operan libremente, la guerilla colombiana y los cárteles de la droga...”, ha afirmado la opositora venezolana María Corina Machado en una rueda de prensa en Oslo tras recibir el Premio Nobel de la paz. “Esto ha convertido Venezuela en el epicentro criminal de América”, ha añadido.

Según Machado, lo que sostiene al Ejecutivo venezolano es un “fuerte sistema de represión” cuyos fondos proceden del tráfico de armas y del petroleo y, sin esos fondos, “el régimen se terminará”, por que ha pedido a la comunidad internacional que ayude a cortarlos.

Corina Machado salió este jueves al balcón del Grand Hotel de Oslo tras llegar a la capital noruega para recibir el Premio Nobel de la Paz, saludó a sus seguidores ya de madrugada y cantó el himno de su país con la mano en el pecho. Es su primera aparición pública desde enero de este año.

En la rueda de prensa junto al primer ministro noruego, Jonas Gahr Støre, ha agradecido el galardón que le han concedido como un “reconocimiento al pueblo venezolano” y ha afirmado que ella es “sólo una de entre los millones de personas que conforman un movimiento por la democracia” en Venezuela.

Por su parte, Støre ha declarado que en Venezuela hay “un régimen autoritario que combate a su propia gente, con millones de refugiados”, asegurando al mismo tiempo que Noruega respeta la “voluntad” de los venezolanos y el derecho internacional.

De Venezuela a Curazao

El viaje a Oslo de la opositora venezolana y premio nobel comenzó el martes con la salida de su país por vía marítima hacia Curazao, según hipótesis de varios analistas, y se completó con un viaje en avión a la capital noruega con escala en Estados Unidos.

Machado, de 58 años, no ha desvelado los detalles de su periblo, pero ha agradecido la ayuda “a todos los hombres y mujeres que arriesgaron sus vidas” para que ella pudiera llegar a Oslo: “Fue una experiencia, pero mereció la pena”. Además, se ha mostrado muy emocionada tras el reencuentro con sus hijos: “Durante semanas he estado pensando en esa posibilidad, a cuál de ellos abrazaría primero o si abrazaría a los tres a la vez. Fue uno de los momentos más espirituales de mi vida”, ha declarado.

La opositora llegó en la madrugada del jueves a la capital noruega a bordo de un avión privado que, según las páginas de rastreo de vuelos FlightRadar24 y FlightAware, partió desde Curazao, una de las islas de los Países Bajos en el mar Caribe, situada solo 65 kilómetros de la costa de Venezuela.

Según el registro de vuelo de ambas plataformas, el avión que la llevó a Oslo, donde el miércoles su hija Ana Corina Sosa Machado recibió el Premio Nobel, ya que no pudo llegar a tiempo a la ceremonia, es un Legacy 600 del fabricante brasileño Embraer. El avión, con capacidad para 13 pasajeros, está matriculado en México, tiene como base el Aeropuerto Internacional Santiago de Querétaro y es operado por la compañía JetVip Business Aviation.

Para recoger a Machado, la aeronave partió ayer del Aeropuerto Ejecutivo de Miami Opa Locka, en el estado de Florida (EE.UU.) con destino al Aeropuerto Internacional Hato de Willemstad, capital de Curazao.

La opositora venezolana ha dicho este jueves que no cree que el Gobierno del país sepa dónde se ha escondido en los 16 meses que lleva en la clandestinidad, “porque si no, ciertamente, habrían hecho todo para impedir que viniera aquí”. Ha agregado que, si Nicolás Maduro sigue en el poder cuando ella regrese a Venezuela, volverá a entrar al país sin que las autoridades la detecten ni sepan luego donde encontrarla.