Calparsoro advierte de que el rechazo a la violencia de ETA debe ser real y no una formalidad

El fiscal superior de Euskadi, Juan Calparsoro, dice que “el rechazo a la violencia de ETA lógicamente tiene que ser real” por lo que “no basta con una declaración formal” el mundo de Batasuna pueda presentarse a las elecciones con un partido legal.

Además, se ha mostrado contrario a la pena de cadena perpetua y a su inclusión en el Código Penal, del que ha señalado que es “suficientemente duro y estricto con la mayor parte de los delitos”.

En una entrevista en ETB-2, recogida por Europa Press, ha indicado que, ante un escenario de fin de la violencia del terrorismo, la Justicia “debe jugar el papel que le corresponde conforme a la Constitución, que es la aplicación de la ley”.

“Nosotros, como estamos sujetos a los principios de imparcialidad y de legalidad, tenemos que atenernos a ellos. Sin duda que en la ley cabe una interpretación de mayor o menor rigor en función de la realidad a la que debe aplicarse y de la situación social”, ha reconocido.

Sin embargo, ha destacado que la labor fiscal “no debería” verse afectada por la situación política y social a la hora de presentar cargos o afrontar un caso, aunque “otra cosa es que la posición de una determinada persona o grupo ante hechos que pueden ser delictivos cambie la aplicación o la posición de la Fiscalía, en función de esa actitud”. “Eso siempre influye, en este campo y en cualquier otro”, ha agregado.

En caso de que ETA mantenga su actividad, ha considerado que el mundo de Batasuna podría presentarse a las elecciones de forma legal si “se posiciona en contra del terrorismo” de la citada banda, porque “conforme a la Ley de Partidos tendría posibilidad de presentarse”.

Respecto a la posibilidad de que, como señalan algunos dirigentes políticos, no fuera suficiente con una condena de ETA, ha explicado que la decisión sobre la legalidad de un partido correspondería al Tribunal Supremo o al Constitucional.

“Creo que, efectivamente, el rechazo a la violencia de ETA lógicamente tiene que ser real. No basta con una declaración formal. El hecho ya de rechazar la violencia es un llamamiento a ETA, a lo que quede de ETA, para que deje de utilizarla. Es un llamamiento que desde la izquierda abertzale se ha expresado. Ahora, que lo hayan dicho para cubrir el expediente... no sé, pero requiere también confiar en que sea una petición real”, ha agregado.

IZQUIERDA ABERTZALE

Según Calparsoro, la izquierda abertzale “que hasta ahora ha estado más cercana al grupo terrorista ha pedido, ha rechazado la utilización de la violencia y ha hecho un llamamiento lógicamente a lo que queda de ETA para que definitivamente desaparezca la utilización de la violencia”.

Preguntado por la modificación del Código Penal, ha defendido que no es necesario que incluya la cadena perpetua porque es “suficientemente duro y estricto con la mayor parte de los delitos”, además de que dicho supuesto “iría contra la Constitución” y su apuesta por la reinserción.

Asimismo, ha criticado que, en cuanto a la libertad sexual, puede haber existido “un exceso de punición, de penalidad”, porque “a veces se pretende legislar al socaire de cierta alarma social, mediática que no es la mejor para establecer las penas”.

Calparsoro, que tomó posesión de su cargo el pasado 16 de noviembre, ha indicado que “cuesta la adaptación” al nuevo destino, aunque se encuentra “contento” de su llegada a Euskadi desde La Rioja, donde realizaba su labor con anterioridad también como fiscal superior.

En cuanta a la ausencia de representantes del PP en su toma de posesión, ha indicado que desconoce la razón y tampoco se la ha pedido, pero ha negado que en Euskadi la política este judicializada o que la Justicia esté politizada.

El fiscal también ha asegurado que su labor tendrá, entre otras preferencias, la lucha contra la violencia de género porque es “un tema de mucha trascendencia social”, sin olvidar la violencia sobre los menores, la siniestralidad laboral, la seguridad vial y “la búsqueda de medidas alternativas y la mediación” en los procesos legales.