Canadá contra el bisfenol A
La medida, adoptada por el Ministerio de Salud y Medioambiente, es la primera que toma un país contra el bisfenol A, objeto de diversos estudios y, según algunos de ellos, causa de secuelas a largo plazo en animales expuestos a la sustancia. El senador estadounidense Charles E.Schumer ha declarado que tiene intención de hacer una propuesta legislativa para que la prohibición entre en vigor también en su país. En principio, se prohibiría su empleo en todos los productos infantiles, además de los biberones, ya que está presenten en juguetes y otros productos que los niños pueden llevarse a la boca. También habría que prohibir su empleo en envases de alimentos y bebidas para adultos.
La catalogación del bisfenol A como elemento tóxico permitirá a Canadá prohibir, en último término, la fabricación con este componente. El policarbonato, que es la sustancia con la cual se fabrican la mayor parte de los biberones de Norteamérica, imita al cristal pero es más ligero y resistente a los golpes.
Aún hay un periodo de 60 días durante los cuales podría darse marcha atrás en la decisión, pero es poco probable que eso suceda, dada la larga serie de informes encargados por el gobierno antes de hacerse pública su postura al respecto. De todas formas, la medida todavía podría tardar un año en ponerse en práctica.
En una rueda de prensa, el ministro de Medioambiente, John Baird, ha declarado que su gobierno no se demorará “para proteger a la población y el entorno de los efectos a largo plazo del bisfenol A”. En el encuentro, Baird apareció con varios modelos de biberón que no emplean esta sustancia en su fabricación. El ministro de Salud, Tony Clement, ha declarado que después de revisar 150 estudios científicos y de elaborar varios ellos mismos, los expertos de su departamento han llegado a la conclusión de que los niños de 0 a 18 meses eran los que más riesgo corrían por su exposición a esta sustancia. Las consecuencias que ha citado son alteraciones “neurológicas y de comportamiento”.
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