El Lemona expugna Las Gaunas

Hay tardes en las que es mejor quedarse en casa. Algo así debieron pensar muchos de los aficionados presentes en Las Gaunas cuando vieron enfilar a Logroñés y Lemona el túnel de vestuarios al término de los primeros 45 minutos. Riojanos y vascos les acababan de regalar 45 minutos de aburrimiento. Al menos, hasta el descanso, el frío no empezó a apretar. El que no se consuela, es porque no quiere.

Esos 45 minutos de tedio fueron, más concretamente, 40. Los que transcurrieron entre los dos 'uy' de la grada. El primero, de susto; el segundo, de alegría. Fueron los remates de Jokin, a los tres minutos de partido, para el Lemona tras fallo defensivo de los centrales blanquirrojos que salvó Heras, y el despeje, demasiado ajustado al palo del meta del Lemona, de Josu, a los 44 minutos.

Entre uno y otro remate, y como si de un sándwich se tratara, locales y visitantes se entregaron una pelea inútil por tomar las riendas del partido. Nadie lo consiguió. El Logroñés lo intentó primero por el centro del campo. Con Candelas y Jaume dirigiendo la orquesta, Iván y Txopi obligaron a los de Setién a redirigir sus pasos. Con interferencias en la conexión con Tomi y José, el Logroñés buscó las bandas.

Santamaría en la derecha y Omar en la izquierda, primero, y al revés, después, buscaron incesantemente la línea de fondo. Todo en vano. Se colgaron balones, se buscaron pases atrás… Pero ni desplegando todo su catálogo conseguían los riojanos ganar metros. Siempre había un jugador rojinegro dispuesto a cortar balones.

Así, sólo cuando Santamaría ocupó la zurda y colgó un balón en las postrimerías de la primera parte la afición soñó con el gol. Hubiera sido en propia puerta (algo indiferente para los intereses riojanos) pero el acrobático despeje de Josu (la mejor ocasión del Logroñés) salió ligeramente desviado.

No mejoró mucho la situación tras el paso por vestuarios. Es más, empeoró. Lo hizo porqué el Logroñés saltó desganado. Lo aprovechó el Lemona que, ahora sí, comenzó a manejar con más soltura el balón. Un balón colgado por De Paula desde el centro del campo que Gusi prolongó y que a punto estuvo de sorprender a Heras y un remate de Jokin que Heras atrapó junto a la cepa del poste fueron los indicios de que algo no terminaba de funcionar en los blanquirrojos.

Así que después de que tras 62 minutos de juego el resultado no fuera de su agrado, Setién buscó un revulsivo en el banquillo. Como Candelas, que suele ejercer de tal, estaba sobre el césped, echó mano de Cyril, mandó a Tomi a la banda y dejó al luso-francés por detrás de Tomi.

Y pareció que el plan funcionaba. Poco a poco se consiguió quitar el Logroñés el dominio vasco y tras una bonita combinación Tomi-Cyril que este mandó fuera por poco, el propio Tomi remató, en el segundo palo, al fondo de la redes de José Carlos el saque de esquina botado por Santamaría.

Era demasiado premio para los blanquirrojos. Quizá por eso el fútbol le guardaba a Setién y los suyos una desagradable sorpresas. Un minuto después Olondo, desde la banda derecha, centró al interior del área y en mitad del barullo Jokin batió a Heras. Empate.

Lo peor estaba por llegar. Y no tardó mucho. Cinco minutos después el Lemona acabó por poner en entredicho la solvencia defensiva de los blanquirrojos al aprovechar un centro desde la derecha (la misma jugada que en el empate) para establecer el 1-2. También era injusto.

Alineaciones:

CD Logroñés:

Raúl Heras, Jorge Campos, Zeki, Raúl García, Galiano; Candelas, Santamaría; Jaume (Ubis, m. 86), Tomi, José y Omar (Cyril, m. 62).

Lemona:

José Carlos, Mikel (San Pedro, m. 58), Gorka, Josu, Fran, Iván, De Paula (Koldo, m. 89), Olondo, Jokin (Alain, m. 79), Txopi y Gusi.

Goles:

1-0, m. 76: José; 2-1, m. 77: Jokin; 1-2, m. 82: Alain

Árbitro: David Giménez García. Amonestó al local Tomi y a los visitantes De Paula y Mikel.

Incidencias: Partido correspondiente a la jornada 13 de Segunda división B disputado en Las Gaunas.