La UDL suma en Urbieta
El Gernika se está jugando la vida, se conoce Urbieta y trata de exprimirse al máximo para escapar del descenso. La UDL, por su parte, suspira -que no ambiciona- por la segunda posición, sobre todo tras el tropiezo del Mirandés en Urritxe. Dos objetivos diferentes que no se acusaron sobre la hierba artificial. Los de Urtzi Arrondo apostaron por la seguridad defensiva para hacer daño desde el balón parado y con centros laterales. Mientras que los blanquirrojos, tras unos minutos de asentamiento en el campo, pasaron a la acción intentando ser dominadores del ritmo y del juego, pese a que en la recta final, el miedo a perder pasó factura a los blanquirrojos.
Los de Sergio Rodríguez lo intentaron durante varios minutos del primer períod, pero en la segunda mitad se impuso más el juego trabado, el de pocas combinaciones, mucha intensidad y escasas o nulas ocasiones. La última sustitución, ya en el minuto 90, del técnico logroñés fue una declaración de intenciones, Santos por Rayco. Hasta ese momento, los riojanos buscaron con algo más de criterio, siempre sin arriesgar en exceso, la portería rival. Pero como viene sucediendo siempre que los logroñeses salen del territorio riojano las oportunidades fueron mínimas. Cierto que a Miguel no se le recuerda intervención meritoria.
Al Gernika el punto le puede valer -suma 16 empates-, pese a seguir en descenso, y quizá a la UDL (56 puntos), también. Reduce distancias con el Mirandés (59) y aumenta la renta con el Barakaldo (51). Los pesimistas dirán que se ha vuelto a perder una gran oportunidad -son dos tablas seguidas tras el 0-0 ante el Leioa-, mientras que los optimistas tirarán de estadísticas, ya que los números en el apartado defensivo son sublimes. No hay nada nuevo en esta UDL que, a domicilio, saca a relucir su lado más práctico.
No resultó sencillo en Urbieta, pero con el paso de los minutos los de Sergio Rodríguez fueron acercándose a un seguro Carrio. Eso no quita para que el Gernika cercara a Miguel con varios saques de esquina en el arranque. Torrealdai tuvo un remate de cabeza que se marchó fuera en la acción más peligrosa de los anfitriones junto a una volea de Parra que golpeó en un defensor riojano. Fue apareciendo más la UDL con un tiro de Rayco, que atrapó en dos tiempos Carrio. También Olaetxea, una de las novedades en el once además de la vuelta de Iñaki al lateral zurdo, era importante en la segunda línea.
De esta forma, el exfutbolista del Gernika gozó de un remate de cabeza y no llegó a un buen centro de Andy en una falta lateral. Aproximaciones que invitaban al optimismo y que animaban a los logroñeses. No en vano, Marcos André estuvo a punto de sorprender con un zapatazo lejano. Aun con todo, el duelo no terminaba de abrirse y el Gernika, siempre que podía, buscaba la manera de sacudirse del dominio.
En la segunda mitad, a excepción de una jugada de Juan Iglesias, con dos tiros de Marcos André y el posterior rechace del jugador pucelano, la UDL quería dar ese paso adelante, pero no se lo terminaba de creer. Eso que el Gernika tampoco es que derrochara talento, por algo ocupa un lugar en el descenso. Con los locales optando por guardar la ropa y los visitantes sin acabar de confirmar sus aspiraciones, el duelo fue derivando en lo que más le convenía al conjunto local: poco juego, nulo ritmo, más jugadas de estrategia y poca presencia en las áreas.
De hecho, los de Urtzi Arrondo jugaron sus bazas en la recta final colgando balones, buscando un rechace o un rebote para sumar los 3 puntos. Los cambios, en el bando riojano, no surtieron el efecto deseado ya que Víctor López, con pocos minutos en las últimas citas, no estuvo fino, mientras que Pedrito no pudo ser el agitador que, por ejemplo, sí fue hace siete días. En el horizonte, el Oviedo B, quinto clasificado a 13 de los riojanos.
0