Buenas noticias para una joya del patrimonio recientemente recuperada en Madrid. El renacimiento del frontón Beti Jai ha sido galardonado con el Premio Nacional de Restauración y Conservación de Bienes Culturales 2025, a propuesta del jurado reunido este miércoles. El galardón, concedido por el Ministerio de Cultura, está dotado con 30.000 euros.
El jurado destaca esta rehabilitación “por lo que representa, no solo por los valores de una intervención de restauración arquitectónica ejecutada conforme a sólidos criterios y metodología contemporánea de tratamiento de bienes culturales, sino que además se cimienta sobre la acción jurídica de protección de un bien singular y se desarrolla, cada día, mediante colaboración entre la sociedad civil y el gobierno municipal”, apunta el Ministerio de Cultura en nota de prensa.
Además, el jurado ha expresado que “este proyecto, ejecutado entre los años 2015 y 2024, supone un ejercicio innovador de corresponsabilidad, en el que la ciudadanía y la administración han trabajado conjuntamente para devolver a Madrid una joya única e irrepetible”. El fallo añade que “es una muestra del ejercicio de los derechos culturales, donde la ciudadanía no es un complemento, sino el núcleo de su legitimidad patrimonial”. “La conservación del bien se convierte en un acto de democracia cultural, a partir de la reivindicación ciudadana, especialmente desde la constitución en 2009 de la Plataforma Salvemos el Beti Jai”, agrega.
La iniciativa fue promovida por el área Obras y Equipamientos del Ayuntamiento de Madrid, aunque también el área de Cultura ha tenido un destacado papel en su recuperación. La restauración y puesta en valor del antiguo frontón Beti Jai, ubicado en el madrileño barrio de Chamberí, es uno de los proyectos más significativos de recuperación del patrimonio arquitectónico contemporáneo del Ayuntamiento de Madrid.
La colaboración entre la plataforma Salvemos el Beti Jai y el Ayuntamiento de Madrid ha sido clave además para la apertura de un Centro de Interpretación en 2024 y la vuelta de la pelota vasca a sus instalaciones, con una programación estable de visitas guiadas, actos deportivos y un pequeño museo explicativo de las instalaciones, levantadas a finales del XIX.
Su buen entendimiento ha dejado además en papel mojado la vía libre judicial a una reforma y posible explotación privada, bendecida por los tribunales pero descartada por el área de Cultura del Ayuntamiento, que apuesta por la gestión pública de estas instalaciones. “El Beti Jai no se ha planteado nunca como un negocio, se ha planteado como una oportunidad patrimonial, para la ciudadanía y así se está aprovechando”, aseguró la delegada hace unos meses.
El frontón Beti Jai es un icono de la Arquitectura del Hierro, que tuvo su momento de mayor esplendor a finales del siglo XIX y principios del siglo XX, convirtiéndose desde su apertura al público en uno de los templos del juego de pelota en la capital. Gracias al impulso ciudadano, canalizado a través de la Plataforma Salvemos el frontón Beti Jai, la Comunidad de Madrid protegió en 2011 como Bien de Interés Cultural un inmueble que estuvo a punto de colapsar.
Expropiado por el Ayuntamiento en 2015, el Beti Jai fue rehabilitado y sacado de su estado de ruina durante la etapa de Manuela Carmena como alcaldesa. En la primera legislatura de Almeida se deterioró por falta de uso y planes por parte de Cultura pero con la llegada de Rivera de la Cruz al área, su equipo dio un nuevo impulso a este Bien de Interés Cultural, joya de la época en la que los frontones poblaban Madrid: primero se abrió puntualmente al público para visitas y hace un año se reabrió de forma permanente como centro de interpretación.
El jurado que ha otorgado este premio estuvo presidido por Ángeles Albert, directora general de Patrimonio Cultural y Bellas Artes, como vicepresidente ha actuado Susana Alcalde Amieva, subdirectora general del Instituto del Patrimonio Cultural de España y ha estado compuesto por los siguientes vocales: Ana Laborde, Premio Nacional de Restauración y Conservación de Bienes Culturales 2024; Alfonso Muñoz Cosme Catedrático de Construcción y Tecnología Arquitectónicas de la Universidad Politécnica de Madrid; Olaia Fontal Merillas, directora del Observatorio de Educación Patrimonial en España de la Universidad de Valladolid; José Luiz Pederzoli Junior responsable de la Unidad de Planificación Estratégica del ICCROM; César Abella Vázquez, director de TRIVIUM estratexias en cultura e turismo y miembro de ICOMOS; Verónica Ojeda Jiménez, conservadora restauradora de Documento Gráfico en el Centro de Conservación y Restauración de Documentos Gráficos del Cabildo Insular de La Palma; María Mercedes González Redondo, delegada del Rector para Igualdad, Diversidad y Compromiso social de la Universidad Politécnica de Madrid (UPM) y Jorge García Gómez-Tejedor jefe del Departamento de Conservación-Restauración del Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía.