Repsol, sobre el impuesto a las energéticas: “No sé si es el mejor día para hacer predicciones políticas en España”

“No sé si es el mejor día para hacer predicciones políticas en España”. Así ha respondido el consejero delegado de Repsol, Josu Jon Imaz, en una conferencia con analistas tras los resultados del primer trimestre, preguntado por el futuro del impuesto extraordinario a las energéticas. Imaz se ha expresado así en alusión al sorprendente anuncio por carta del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, abriendo la puerta a dimitir el próximo lunes tras la investigación judicial abierta a su esposa, Begoña Gómez, como consecuencia de la denuncia de un sindicato ultraderechista.

A Imaz le han preguntado por ese impuesto, que el Gobierno anunció en diciembre que se va a reformular para permitir algún tipo de exención para las inversiones verdes. Repsol lo ha recurrido, como la mayoría de empresas del sector, y se ha mostrado especialmente beligerante contra ese gravamen, que se puso en marcha tras el estallido de la crisis energética por la invasión de Ucrania.

Imaz ha pronosticado que la prestación, que se calcula sobre las ventas de las compañías energéticas, “va a tener un fin”. “Desde el punto de vista legal no hay espacio en 2025 para tener ningún tipo de tasa temporal”. En este ejercicio, “viendo y escuchando las afirmaciones de los representantes políticos en España y la UE, creo que hay espacio para un marco en el que se priorice la inversión”. Pero Repsol ha preferido ser “prudente” e incluir el primer pago del impuesto en este primer trimestre, con un impacto en resultados de 168 millones de euros.

Por Antonio M. Vélez.