El secretario general de la ONU, António Guterres, pidió hoy a los Gobiernos europeos respeto a la ley internacional y protección para refugiados y migrantes, tras la decisión de Italia y Malta de no permitir desembarcar al barco “Aquarius”.
“Siempre he estado extremadamente preocupado por el hecho de que el espacio para la protección de refugiados en Europa puede estar reduciéndose”, dijo Guterres preguntado por la postura italiana ante este buque, que lleva más de 600 migrantes a bordo y que finalmente será acogido por España.
El jefe de las Naciones Unidas dijo que los países “tienen derecho a gestionar sus fronteras” y a “definir sus propias políticas de migración”, pero les llamó a hacerlo “de manera sensible a la protección” y en “pleno respeto de la legislación internacional sobre refugiados”.
El barco “Aquarius”, de la ONG francesa Sos Méditerranée, lleva a bordo a 629 inmigrantes rescatados en las últimas horas, y de ellos 123 son menores no acompañados, once niños pequeños y siete mujeres embarazadas.
El buque navegaba a su suerte en el Mediterráneo por la negativa de Italia y Malta a recibirlo en sus puertos y finalmente será acogido por España, según anunció hoy el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez.
“Es nuestra obligación ayudar a evitar una catástrofe humanitaria y ofrecer 'un puerto seguro' a estas personas, cumpliendo de esta manera con las obligaciones del Derecho Internacional”, señaló en un comunicado el Ejecutivo español.