El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, ha vuelto a participar en un acto del PSOE tras recibir amenazas de muerte, como Pablo Iglesias y la directora de la Guardia Civil en el que ha asegurado que hay que poner fin a 26 años “de odio”. “Ayuso y Vox tratan de enfrentar esta comunidad con el resto de España”, ha dicho Marlaska.
El titular de Interior ha afeado a la derecha que no condene sin tapujos las amenazas que han recibido. “Cuando hay señalamiento de personas, no valen las medias tintas”, ha advertido Marlaska, que ha comparado esas amenazas con las de ETA: “Hay que hacer la condena de los hechos en concreto porque si no nos recuerda a otros fascismos, a otros momentos que este estado de derecho derrotó”.
Escribe Irene Castro.