Barco turco fue atacado por aviones del Gobierno libio reconocido en Tobruk

Fuerzas aéreas leales al Gobierno libio reconocido internacionalmente abrieron fuego esta madrugada contra un carguero turco por “entrar ilegalmente” en las aguas bajo su jurisdicción, confirmó a Efe una fuente de seguridad de la ciudad de Tobruk (este).

Según la misma, un cazabombardero tipo Mirage21 adscrito a las fuerzas del exgeneral gadafista Jaifa Hafter disparó contra el buque cuando navegaba en las cotas de la ciudad de Ain Gazal, situada a 65 kilómetros al oeste de Tobruk, sede del Gobierno reconocido por la comunidad internacional.

Las fuerzas de Hafter, un controvertido general que apoyó al derrocado dictador Muamar Gadafi y luego se convirtió en uno de sus principales opositores en el exilio, bombardeó el barco porque entró de “manera ilícita y sin autorización” en aguas de Tobruk, afirmó la fuente.

Esta no reveló, sin embargo, si las fuerzas libias enviaron señales previas de alarma.

El ataque causó la muerte de un marinero turco y de varios otros resultaron heridos.

La tripulación del barco reparó en el mar los daños del buque, señaló la fuente, que añadió que la mayoría de las mercancías transportadas por el barco son muebles con destino al puerto de Alejandría en Egipto.

La fuente explicó que la nave turca, que transportaba cartón yeso procedente de España, ya abandonó las costas libias.

El ministerio de Exteriores turco ha expresado su “rotunda condena” por ese “innoble ataque a un barco civil en aguas internacionales”.

“Se ha protestado ante las autoridades libias por este despreciable ataque, y se ha exigido que cese de inmediato toda acción contra la seguridad del mencionado barco u otros buques turcos que se puedan hallar en la zona, y que se lleve a los responsables del ataque ante la justicia”, reza el comunicado de Exteriores.

Turquía “se reserva el derecho de ejercer todo tipo de reclamaciones, incluida la de indemnizaciones, ante las instituciones internacionales. Ya se ha intervenido en este sentido ante las organizaciones internacionales”.

Libia es un estado fallido, víctima del caos y la guerra civil, desde la caída en 2011 de Gadafi. Desde las últimas elecciones, dos gobiernos, uno rebelde en Trípoli y otro reconocido en Tobruk, luchan por el control del poder y los recursos naturales del país apoyados por milicias islamistas, mercenarios, líderes tribales, señores de la guerra y contrabandistas.

En medio, crece la amenaza y el poder de grupos yihadistas como la rama libia del grupo autoproclamado Estado Islámico y de la organización de Al Qaida en el Magreb islámico (AQMI), aún el grupo terrorista más influyente del norte de África.