Diputado argentino acusado de desviar fondos dice que no se amparó en sus fueros

El diputado argentino Julio De Vido aseguró hoy que “jamás” ha utilizado su condición de aforado para evitar las causas por corrupción en las que está implicado, un privilegio que esta semana un fiscal pidió retirarle para que sea detenido e interrogado por el supuesto desvío de fondos públicos.

El juez argentino Luis Rodríguez desestimó este viernes dicha solicitud al considerar que las pruebas reunidas hasta el momento “no permiten conformar el estado de sospecha” para arrestar a quien fuera ministro de Planificación Federal en las administraciones de Néstor Kirchner (2003-2007) y Cristina Fernández (2007-2015).

En declaraciones a Radio Rebelde, hoy De Vido hizo hincapié en que no necesitaba “ningún salvavidas de ningún juez” porque tiene a sus espaldas una gestión de 22 años “con obras en beneficio y bienestar de la gente” que lo avalan.

En ese sentido, insistió en que su caso es el “mejor ejemplo” de que “jamás”, desde que se convirtió en diputado hace año y medio, se ha protegido con su fuero, ya que, remarcó, se presentó a las “seis o siete declaraciones indagatorias” a las que fue citado y fue objeto de dos registros.

“Me gustaría que muchos de los que cacarean honestidad en la Cámara de Diputados tuvieran que pasar por un allanamiento de siete horas en mis domicilios”, criticó el diputado del kirchnerista Frente para la Victoria, que cuenta con varias causas abiertas en la Justicia federal.

En ese sentido, denunció que estos procedimientos fueron realizados “con periscopios, revisando cajones de ropa interior de la familia y mandando una cámara del Ministerio de Seguridad para encontrar los 'tesoros de De Vido' que no existen”.

El debate sobre la utilización del fuero parlamentario por parte de exdirigentes kirchneristas para protegerse de las investigaciones por corrupción cobró fuerza después de que la propia expresidenta, procesada en causas de este tipo, anunciara su candidatura al Senado para las próximas legislativas, gesto por el que algunos sectores la acusaron de querer evitar a la Justicia.

La petición de retirada del fuero de De Vido -para el que se hubiera necesitado el visto bueno del Congreso- se enmarca en una causa por la que está acusado, junto a varios funcionarios, de impulsar durante los gobiernos kirchneristas un multimillonario desvío de fondos en un proyecto minero en la ciudad de Río Turbio (provincia sureña de Santa Cruz) que nunca se concretó.

Este sábado, el exministro denunció que en esta última semana fue víctima de “la confabulación de la sociedad mediática-política impulsada por el presidente Mauricio Macri con sus adláteres como (la diputada oficialista Elisa) Carrió y (el ministro de Justicia, Germán) Garavano”.