El Gobierno de EE.UU. acusa a 412 individuos por fraude al sistema de salud

El Gobierno de Estados Unidos anunció hoy cargos contra 412 individuos por defraudar 1.300 millones de dólares con una trama de fraude médico, en la que algunos doctores prescribían ilegalmente analgésicos, medicamento con altos índices de adicción entre los ciudadanos.

El fiscal Jeff Sessions afirmó hoy en una rueda de prensa que se trata de “la mayor operación contra el fraude médico de la historia de Estados Unidos”.

Además, el Departamento de Salud de Estados Unidos ha sancionado a 295 individuos, incluidos doctores, enfermeras y farmacéuticos, y les ha prohibido participar en cualquiera de los programas de salud que el Ejecutivo subvenciona para ayudar a personas con bajos ingresos o avanzada edad.

“Demasiados profesionales médicos, enfermeras y farmacéuticos han optado por violar sus juramentos (éticos) y anteponer la codicia a sus pacientes. Sorprendentemente, algunos han convertido sus centros médicos en empresas multimillonarias”, resaltó el fiscal general estadounidense.

Supuestamente los acusados pedían tratamiento que no era necesario bajo el paraguas financiero de tres planes de salud administrados por el Ejecutivo: el “Medicare”, destinado a las personas mayores de 65 años; el “Medicaid”, dirigido a aquellos con bajos ingresos; y el “Tricare”, para los veteranos de guerra.

A través de esos tres programas de salud, los acusados pedían al Gobierno el reembolso de unas facturas médicas falsas y luego se apropiaban del dinero.

De los 412 individuos acusados, a 120 se les atribuyen delitos relacionados con la prescripción y distribución de ciertos analgésicos muy cotizados en el mercado negro, muy adictivos y que los toxicómanos suelen acabar sustituyendo con heroína, puesto que es mucho más barata.

“Cuatro de cada cinco nuevos adictos a la heroína empezaron con pastillas con prescripción médica”, resaltó durante la rueda de prensa el administrador en funciones de la Agencia Antidrogas Estadounidense (DEA), Chuck Rosenberg.

Desde su creación en marzo de 2007, la unidad del Departamento de Justicia dedicada a perseguir el fraude médico ha presentado cargos contra 3.500 individuos que habían defraudado más de 12.500 millones de dólares a través del programa “Medicare”, dirigido a las personas mayores.