Los Verdes europeos critican la pasividad europea ante la extrema derecha

El copresidente del grupo parlamentario de los Verdes Europeos Daniel Cohn-Bendit criticó en una rueda de prensa en Atenas la pasividad de las instituciones europeas contra el fascismo y el racismo. “En tiempos de crisis, cuando la sociedad está desorientada, el peligro del fascismo aumenta”.

“Es muy importante asegurar un mínimo de protección social para los más pobres en toda Europa, para reducir la influencia de los partidos fascistas”, añadió.

El copresidente de los Verdes Europeos destacó la necesidad de la utilización de una parte de los fondos europeos para asegurar el acceso de todos a la cobertura médica y a la educación.

“Es una de nuestras principales exigencias, e insistiremos aún más en los próximos meses”, dijo a Efe.

Cohn-Bendit advirtió que hay que distinguir entre los partidos fascistas, los partidos de extrema derecha que respetan las reglas parlamentarias y los partidos conservadores-euroescépticos.

Además criticó la postura del Consejo de Ministros y de la Comisión Europea frente al incremento de los crímenes racistas en Europa, a los que acusó de no tomar medidas.

Aún más dura fue la secretaria general del grupo parlamentario de los Verdes Europeos, Vula Tsetsi.

“La Comisión Europea nos ha decepcionado. Es la garante del cumplimiento de los tratados europeos, pero nunca hizo nada contra un Estado miembro por violación de los derechos humanos, aunque haya habido tales casos”, afirmó.

Daniel Cohn-Bendit insistió sobre la importancia de la movilización de los ciudadanos contra el fascismo.

“Cada gobierno debe tomar las medidas adecuadas para la protección de los derechos humanos. Pero lo más importante es la movilización de los ciudadanos. Si ellos se muestra apáticos, incluso si el Gobierno hace su trabajo, no podrá hacer frente al fascismo”, explicó.

“Quisiera ver una manifestación de 500.000 personas en Atenas después el asesinato de Pavlos Fysas”, añadió en referencia a la muerte del cantante de hip hop y activista a manos de un militante del partido neonazi Amanecer Dorado la pasada semana.

Un reciente estudio del grupo socialdemócrata del Parlamento Europeo sobre las consecuencias de la crisis, concluye que los países en los cuales se produjo el mayor retroceso democrático en los últimos años son Grecia y Hungría.

Precisamente se trata de los dos países en los cuales se hayan los partidos fascistas más influyentes de Europa, Amanecer Dorado y Jobbik respectivamente.