El contingente militar turco se ha dirigido a zonas próximas a un enclave kurdo

El contingente militar turco que anoche entró en el territorio sirio se ha dirigido hacia zonas del oeste de la provincia de Alepo (noroeste) próximas al enclave kurdo de Afrín, informaron hoy activistas y la principal milicia kurdosiria.

El portavoz de las Unidades de Protección del Pueblo (YPG, en sus siglas en kurdo) en Afrín, Rojhat Roj, dijo a Efe por teléfono que en las últimas horas un convoy militar de Turquía entró a Siria a través de la frontera con la provincia de Idleb (noroeste).

“Tras irrumpir en Idleb, han viajado al oeste de Alepo y se han situado en zonas alrededor de Afrín”, denunció Roj, cuya milicia es la principal facción kurdosiria.

El portavoz indicó que el convoy está compuesto de veinte carros blindados, ocho excavadoras, cuatro vehículos BRDM (blindados anfibios) y otros doce para transporte de comida y efectivos.

Roj detalló que en total han entrado cien soldados turcos escoltados por milicianos del Organismo de Liberación del Levante -la exfilial siria de Al Qaeda- que iban pertrechados con armas automáticas.

Según el portavoz, se han dirigido a los puntos de contacto con las YPG y en ningún caso a zonas de Idleb.

El Observatorio Sirio de Derechos Humanos confirmó que un convoy castrense de Turquía entró en Siria por Kafr Losín, en la provincia de Idleb, y se trasladó al oeste de la vecina Alepo con la protección de la antigua rama de Al Qaeda.

Anoche, la cadena CNNTürk apuntó que un importante contingente de tropas turcas cruzó a Idleb desde el territorio turco para unirse a las unidades exploratorias que ya se hallan allí.

Doce blindados del Ejército turco, con unos 80 soldados de las fuerzas especiales, pasaron sobre las 19.15 hora GMT de la provincia turca de Hatay hacia Idleb, y otros 40 militares seguirán pronto, aseguró un experto en la citada cadena.

Turquía mantiene desde el domingo pasado unidades de exploración en Idleb, cuya misión es “establecer puntos de vigilancia”, según un comunicado del Estado Mayor turco, difundido el lunes.

Se trata de un despliegue de “fuerzas de control para rebajar tensiones” en el marco del acuerdo alcanzado a mediados de septiembre en la última ronda de la conferencia de Astaná, que cuenta como países garantes a Rusia, Irán y Turquía.