La generación de los videojuegos quiere “resetear” Turquía

Además del uso de las redes sociales como Facebook y Twitter, las protestas antigubernamentales en Turquía tienen en el lenguaje de los videojuegos y en los guiños a la cultura digital otro de sus aglutinantes generacionales.

Una de las referencias utilizadas es la saga de videojuegos “Grand Theft Auto”, conocida por sus siglas GTA, y que trata sobre corrupción y delincuencia, asuntos empleados ahora como crítica contra las autoridades.

“Os habéis buscado problemas con la generación que perseguía a policías en GTA”, es un lema que ha corrido como la pólvora por las redes sociales y que originalmente apareció en una pintada en la avenida Istiklal, que lleva a la Plaza Taksim, donde empezaron las protestas. Ahora, ese lema aparece por todas partes.

Gta tuvo en 2002 un enorme éxito en Turquía gracias a una adaptación local basada en una conocida serie turca y, desde entonces, las siguientes secuelas de la saga son muy populares.

Otra referencia muy difundida en las redes es una parodia sobre el popular videojuego para móviles “Angry Birds”, en el que el pájaro protagonista lleva una máscara de gas para protegerse de los botes de humo.

“El juego virtual ha marcado el 'sistema operativo' de esta generación de una forma única y diferente a la de sus padres”, explica a Efe Merve Alici, publicistas y activista proderechos civiles.

Alici subraya la paradoja de que una generación en la que el gusto por los videojuegos parecía una señal de apatía y tendencia apolítica, sea la que haya organizado las mayores revueltas en el país en una década.

En las redes sociales algunos de los activistas también utilizan jerga procedente del mundo de los videojuegos, como decir que se ha superado “una pantalla”, o “un nivel”, al hablar de sus preparativos para aliviar los síntomas de los gases lacrimógenos.

Los botes difusores con una mezcla de leche y antiácido estomacal son un visibles en las protestas para contrarrestar esos efectos.

Un diálogo en las redes sobre las protestas es así: “Destreza +50, resistencia al veneno +30”, agrega la experta, como si las soluciones ácidas y las máscaras de gas asemejasen “la obtención de habilidades o la adquisición de nuevo equipamiento” en un juego.

Todo esto apunta a “una realidad paralela en las protestas, donde los manifestantes jóvenes se sientes heroicos y audaces como los personajes con los que juegan”, opina.

“Parece que actúan con un espíritu similar de 'desafío al sistema' y 'lucha por el bien' que aparece en todos los juegos”, concluye.

Ebru, una profesora que ha seguido las protestas desde el inicio, considera que “la generación nacida en los años 90 ha crecido con los videojuegos y esa experiencia común es un vínculo para reforzar su sentido de pertenencia a la hora de luchar por más libertad”.

Esto difiere de generaciones anteriores, que compartían experiencias comunes más ligadas a la cultura de la televisión, agrega.

Según una reciente encuesta de la Universidad Bilgi de Estambul, el perfil medio de quienes protestan contra el Gobierno es el de un joven de entre 19 y 30 años, sin afiliación política, laico e indignado con el autoritarismo del Gobierno y la violencia policial.

La actitud poco dialogante del primer ministro, Recep Tayyip Erdogan, es lo que ha empujado a echarse a las calles al 92,4 % de los manifestantes, que exigen más democracia y menos gases lacrimógenos, según ese estudio.

Otro de los medios utilizados para comunicarse en las protestas, Twitter, ha sido definido por Erdogan como “la mayor amenaza para la sociedad”, una expresión que también ha sido motivo de amplia burla en las redes.

La Policía detuvo a 34 personas bajo la acusación de usar esa red de micromensajes para “incitar a la revuelta”.

Luis Lidón