La CE asegura la cooperación con la comisión de la investigación de la Eurocámara a Volkswagen

La Comisión Europea (CE) aseguró hoy su disposición a cooperar “enteramente” con la comisión del Parlamento Europeo (PE) que investiga las emisiones fraudulentas de coches diesel tras el escándalo de Volkswagen.

“Estamos más que dispuestos a colaborar enteramente con el PE”, garantizó la portavoz comunitaria Lucía Caudet.

La comisión especial del PE informó esta semana de que pretende invitar los antiguos y actuales comisarios de Medioambiente y de Industria.

Preguntada por si el Ejecutivo comunitario va también a establecer una “investigación interna” para analizar su comportamiento ante la crisis de las emisiones, la portavoz indicó que “más que hablar de investigación interna, hemos dicho que no tenemos nada que ocultar”.

“Todos los estudios que la CE ha realizado, sobre todo nuestro consejo conjunto de investigación en el contexto de la elaboración de nuevos test de emisiones de óxido de nitrógeno (NOx) en situación de conducción real, siempre han sido publicados en nuestra página web, discutidas con expertos nacionales y disponibles igualmente para el PE”, explicó Caudet.

Según dijo, “estamos dispuestos a colaborar con el PE en lo que concierne a echar la vista atrás; somos muy transparentes, no tenemos absolutamente nada que ocultar”.

La portavoz subrayó que la Comisión está “centrada en la respuesta reguladora que hay que dar” al escándalo de las emisiones de Volkswagen, que se disparaban en condiciones de conducción real sin que lo remarcaran las pruebas.

“Hemos introducido nuevos test en condiciones de conducción real que van a captar mucho mejor las verdaderas emisiones de los vehículos diesel y llevarán a una mejora neta de la contaminación del aire”, recordó.

Apuntó además que el pasado 27 de enero la CE propuso “reformar completamente de manera muy ambiciosa el sistema de homologación de coches, el sistema por el que controlamos que un fabricante, antes de que pueda colocar en el mercado europeo un vehículo, responda a todas las normas de seguridad, medioambientales y de producción”.

Además, señaló que Bruselas propone “pruebas una vez que el vehículo esté circulando” y dar “más poder de investigación y de sancionar si es necesario” a la Comisión, “visto que en el contexto actual nuestros poderes son bastante limitados” y esa institución tiene “poca capacidad para verificar el cumplimiento” de las normas, una tarea que recae principalmente en las autoridades nacionales.