El teléfono contra el acoso escolar del Gobierno registra 38 “casos potenciales” al día

El teléfono del Ministerio de Educación contra el acoso escolar (900 018 018) ha recibido 4.714 llamadas desde que comenzó a funcionar, el 1 de noviembre pasado, de las que 1.594 son casos potenciales de este tipo de maltrato, lo que representa una media aproximada de 38 diarios.

El ministro Íñigo Méndez de Vigo ha explicado este martes en su comparecencia en la Comisión de Educación del Senado que cuando se detectan indicios de acoso, los profesionales que atienden la línea lo ponen en conocimiento de las inspecciones educativas de las comunidades. Y de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado si fuera necesario en los “casos más graves” a través de un fichero confidencial.

En la presentación del recurso, el Ministerio no dio detalles sobre cómo se procede una vez que se registra un caso posible y con qué criterios se lleva a cabo ese trabajo. Entonces, Educación no había dado ninguna indicación a los interlocutores posibles: inspección, centros o comunidades autónomas. Los centros de salud y el Ministerio Fiscal también podrán tener conocimiento de algunos casos, si así se decide.

El número funciona todos los días del año, las 24 horas del día y no deja señal en la factura telefónica. Forma parte del Plan Estratégico para la Convivencia en los centros escolares en el que está trabajando el Gobierno. En enero, el ministro avanzó algunas directrices del plan, que incluye una batería de más de 70 medidas.

De ellas se destacaban 16, de las cuales existían ya cuatro: la web sobre convivencia escolar, el Plan Director para la Convivencia y Mejora de la Seguridad en los Centros Educativos y sus Entornos, el convenio con la Agencia Española de Protección de Datos para formar en redes sociales y el registro de delincuentes sexuales. De las restantes, solo dos se han hecho realidad: el teléfono y la emisión de un sello de Correos específico para “concienciar en la lucha contra el acoso escolar”.

El Ministerio de Educación se escuda para explicar la demora en que “un Gobierno en funciones tiene sus competencias limitadas” y asegura que “se ha avanzado en lo que se ha podido” hasta ahora. “No se ha dejado de trabajar”, garantizan fuentes del Ministerio.