Las madres y padres de la Escuela de Montanuy, junto a vecinos, vecinas y representantes del Ayuntamiento, se han concentrado esta tarde a las puertas del colegio para denunciar públicamente la situación “insostenible” que atraviesa el centro desde el inicio del curso 2025-2026. Reclaman la cobertura urgente de la plaza de Auxiliar de Educación Especial (AEE) y del Técnico de Educación Infantil (TEI) para el aula de dos años, vacantes que afectan directamente a la atención del alumnado.
Según la alcaldesa de Montanuy, Esther Cereza, desde el comienzo del curso “no hay personal asignado al colegio. El técnico del aula de dos años no estaba en la lista de alumnos y se tuvo que rehacer la matrícula. A día de hoy seguimos sin respuesta del Departamento de Educación. Los niños están siendo atendidos, pero el resto del alumnado no recibe la atención que debería. Son 14 alumnos, y ni el TEI ni el auxiliar han llegado”.
Cereza lamenta además “el silencio administrativo” y la falta de comunicación directa con la directora del Servicio Provincial de Educación, que, asegura, no responde a las llamadas del Ayuntamiento. “Si nos dieran una fecha concreta, podríamos organizarnos, pero así es imposible”, subraya.
Durante la concentración, las familias han leído un manifiesto en el que denuncian que la falta de personal “afecta a toda la comunidad educativa: al alumnado con necesidades específicas, que no recibe la atención que le corresponde por derecho; al resto del alumnado, que ve mermada la calidad educativa; y al profesorado, que se ve sobrecargado asumiendo tareas que no le competen”. También advierten de que esta situación “no es sostenible ni justa” y “vulnera el derecho a una educación pública, inclusiva y de calidad”.
El malestar ha unido a toda la población, que ha mostrado su apoyo a las familias en la protesta frente al colegio. En el manifiesto conjunto se exige al Departamento de Educación del Gobierno de Aragón una solución inmediata. “La atención al alumnado con necesidades especiales no puede quedar a expensas de si alguien quiere o no venir a Montanuy. La Administración tiene la obligación de garantizar los recursos humanos y materiales necesarios. No se trata de una cuestión de voluntad, sino de derechos fundamentales”, recalcan.
La situación del aula de dos años es especialmente preocupante. Catalina Ballarín, madre de una alumna afectada, explica que realizó la matrícula el 18 de junio, “pero por problemas con el programa informático del Departamento no me permitió hacerlo antes”. Al comenzar el curso, relata, “la nueva directora me comunicó que mi hija no aparecía en el listado de alumnos, por lo tanto no estaba escolarizada. Tuve que volver a hacer la matrícula y, a día de hoy, no he recibido ninguna respuesta ni se me ha informado de cuándo llegará el TEI. Me parece vergonzoso que no puedan dar una respuesta tan básica y se queden en el silencio”.
Desde principios de curso, tanto el Ayuntamiento como las familias se han dirigido al Servicio Provincial de Educación para exigir explicaciones. “Después de diversas llamadas sin respuesta, un correo electrónico y dos cartas, la única contestación recibida ha sido un e-mail del área transversal indicando que debemos dirigirnos a la Dirección General de Planificación de Zaragoza”, detalla la alcaldesa. El pasado 23 de octubre el consistorio remitió una nueva carta a la Dirección General, de la que todavía no ha obtenido respuesta.
El manifiesto, respaldado por el Ayuntamiento, reclama la cobertura urgente de las plazas vacantes y una respuesta formal con plazos concretos por parte de Educación. “No pedimos privilegios, pedimos justicia, equidad y respeto”, concluyen las familias. “La educación pública rural es un pilar fundamental para mantener vivos nuestros pueblos, y nuestros hijos e hijas merecen la misma atención que cualquier otro niño o niña de Aragón. La educación es un derecho, no un favor”.
Desde el Gobierno de Aragón, fuentes del Departamento de Educación han asegurado que “son plazas que se tienen que cubrir y que se están ofertando”.