El Barça ficha a Juanito
En plenas fiestas de Carnaval, en los primeros días de febrero de 1972 y aprovechando un parón liguero provocado por la disputa de un compromiso internacional de la selección española, el Barcelona visitó el Heliodoro con media docena de titulares indiscutibles. En choque amistoso organizado en beneficio de las guarderías infantiles, el técnico del equipo catalán, Rinus Michels, alineó ese día, entre otros, a Sadurní, Rifé, Eladio, Juan Carlos, Fusté, Zabalza, Marcial, Alfonseda, Bustillo, Martí Filosía o Dueñas. Un equipazo.
Respecto al equipo que había ganado (1-2) dos días antes en el Insular en partido de Liga, sólo faltaban Reina, Gallego, Costas y Rexach, convocados por el seleccionador nacional, Ladislao Kubala. Pero incluso atendiendo a esas bajas es difícil justificar la derrota sufrida por el Barça: un 4-0 que pudo ser aún más amplio en un Heliodoro abarrotado, en un tiempo en el que en la Isla el fútbol de elite sólo se veía por televisión. Y en blanco y negro. Mientras, Héctor Núñez, entrenador del Tenerife, dispuso un once titular con sus mejores hombres.
Del Castillo; Óscar, Molina, Esteban, Pepito; Mauro, Cabrera, Bergara; Juanito, Manolo y Laguna fueron los elegidos. Todo el equipo rindió a gran nivel, aunque Rinus Michels quedó encandilado por la actuación de Juan Díaz Sánchez, 'Juanito' (1948-2013), un extremo veloz que fue el encargado de abrir el marcador, de regalar dos goles y de forzar un penalti que el árbitro no señaló. Y de volver loca a toda la zaga azulgrana y especialmente al internacional Eladio. De inmediato, Michels ordenó su fichaje. Y los deseos del holandés eran órdenes.
Así, el 29 de febrero de 1972 Juanito estuvo en el Camp Nou y firmó por el Barcelona. El compromiso rubricado esa mañana ante el presidente azulgrana, Agustí Montal, recogía que el Barça pagaría cuatro millones de pesetas al Tenerife por el jugador, que pasaría a cobrar medio millón de pesetas anuales y se quedaría en la Isla hasta el término de la temporada, para asegurar la permanencia de los blanquiazules en Segunda División. Esa misma tarde regresó a Tenerife para jugar al día siguiente un partido de Copa del Generalísimo ante el Granada... en el que hizo dos tantos.
Sin embargo, en los primeros días de marzo, dos victorias consecutivas ante Jerez y Leonesa (con protagonismo realizador de Juanito en ambos casos) dejaron asegurada la salvación. Y la lesión de Rexach hizo que Michels exigiera la presencia inmediata del extremo. Juanito voló un miércoles a Barcelona y el domingo debutó en San Mamés con victoria (0-1) ante el Athletic, en partido televisado en directo para toda España. A la semana siguiente se estrenaba en el Camp Nou y le marcaba un gol al Valencia. Y siete días después disputaría su primer clásico ante al Real Madrid, resuelto con victoria azulgrana (1-0).
La recuperación de Rexach no le apearía del once y disputó como titular los nueve partidos finales de la competición. Una derrota ante el descendido Córdoba en la penúltima jornada dejó al Barça sin el título de Liga. Lo lograría dos años más tarde, con Cruyff como nueve y con Juanito como pieza importante.
(*) Capítulo del libro ‘El CD Tenerife en 366 historias. Relatos de un siglo’, del que son autores los periodistas Juan Galarza y Luis Padilla, publicado por AyB Editorial.
0