Las Palmas quiere romper estadísticas contra un Betis renovado
La UD Las Palmas busca romper estadísticas en un campo donde hace casi 40 años que no logra la victoria en un partido marcado por el debut en el banquillo bético de Víctor Sánchez y por las urgencias de los verdiblancos por superar su crisis.
Una victoria de los amarillos supondría para el equipo isleño conseguir los mil puntos en Primera división, aunque tendrá que intentarlo en el Benito Villamarín, donde no gana en competición liguera desde 1978.
El club grancanario acumula 997 puntos en sus 33 temporadas en la máxima categoría, por lo que está a solo un triunfo de redondear la cifra milenaria en la élite.
Solo dos triunfos -el último de ellos hace más de 36 años- y cuatro empates es el balance de los amarillos en el feudo verdiblanco después de 25 visitas, aunque parece que los isleños, por la línea de juego que vienen demostrando, llegan seguramente en el momento más adecuado para tratar de poner fin a esa tendencia.
Tras el parón liguero, Las Palmas tiene a toda su plantilla disponible, aunque el entrenador cántabro Quique Setién ha asegurado que hará cambios, por lo que variará el once inicial de los tres últimos partidos.
Tana, aquejado de un proceso gripal en las últimas horas, podría ser uno de los sacrificados, al tiempo que Setién mantiene el debate en la portería, dejando abierta la posibilidad del regreso de Javi Varas en cualquier momento.
Las Palmas viaja con 19 jugadores -uno será descartado antes del partido-, y entre los que se quedan en la isla está el delantero croata Marko Livaja, castigado por su actitud de los últimos días, tras llegar con retraso a un entrenamiento.
Además, no viajan por decisión técnica Hernán Santana, Aythami Artiles, Javi Castellano, Mateo García y Hélder Lopes.
Por su parte, los béticos vuelven a casa después de la derrota ante el Espanyol (0-1) el pasado 30 de octubre, que marcó el principio del fin de su entonces entrenador, Gustavo Poyet; y lo hacen con la imperiosa necesidad de ofrecer una imagen diferente ante los de Quique Setién, que vienen de ganar en su casa al Éibar.
El nuevo entrenador de los verdiblancos, Víctor Sánchez, se ha empleado a fondo esta semana en intentar imprimir su sello para cambiar el rumbo y hacerlo, además, con jugadores que no han contado para Poyet, porque no han encontrado su sitio o, sencillamente, desaparecieron de sus alineaciones.
El primero de éstos es el goleador Rubén Castro, que podría volver a la punta del ataque después de haber jugador a la izquierda o calentado banquillo; y el segundo, el centrocampista canterano Dani Ceballos, que podría recobrar protagonismo tras el ostracismo que ha vivido con el uruguayo en el banquillo.
La puesta de largo de Víctor también podría suponer la entrada de otros futbolistas como el holandés Ryan Donk o el canario Bruno González en el eje de la zaga, uno de los puntos flacos del Betis en esta temporada en la que se encuentra situado en la decimocuarta posición con once puntos, a dos de los puestos de descenso.
Los 22 goles encajados por los verdiblancos los sitúan entre los más débiles atrás de la categoría, en la que sólo son superados en este registro por el colista, el Granada; por lo que uno de los objetivos del nuevo técnico será afianzar defensivamente su equipo para empezar a construir desde atrás.
Otro jugador que podría tener sus opciones es el extremo belga Charly Musonda, quien fue un puntal el año pasado desde su llegada cedido por el Chelsea y que, tras no contar para Poyet, también ha recobrado protagonismo en los primeros entrenamientos de Víctor.
