Fitureando

Hoy Fitur es una feria profesionalizada donde si no estás, no existes. Y un año más el Pabellón de Canarias estuvo a la altura, con un diseño funcional, elegante y sobrio, sin alharacas derrochadoras ni folklorismos excesivos. Las empresas turísticas que acompañan a la presencia institucional también gozan del privilegio de una situación estratégica y el personal es diligente y eficaz. También allí estuvo CANARIAS AHORA RADIO e incluso me llevé la sorpresa de tropezarme con varios oyentes habituales, uno de los cuales me aseguró que escuchaba El Correíllo de Juan García Luján desde Manchester ?internet va a revolucionar también las ondas-, al tiempo que se declaraba hooligan de May del Rosario. Así que el recorrido y el impacto evidencian que ha sido un acierto de Carlos Sosa llevarse la radio en directo unos días a Madrid, donde se espera llegar este año a la cifra de 250.000 visitantes, y el Pabellón de Canarias siempre alcanza records de profesionales, periodistas y curiosos del turismo que acuden a ver la novedad insular de ese año.

Cuando un país ocupa el primer lugar del mundo en algo ?y ciertamente España no puede presumir demasiado de su hegemonía global- detrás está siempre el trabajo silente, tenaz y eficiente de muchas personas. No es exagerado proclamar que el sector turístico español, con su excelente preparación en idiomas, capacidad de servicio, marketing e imaginación, es el más cualificado del globo y dentro de él los profesionales canarios son los más cotizados junto con los de Baleares, pero ligeramente por delante de éstos. Fitur lo está demostrando este año una vez más y de ahí que Paulino Rivero estuviera exultante en su recorrido por el pabellón canario, donde dejó para último lugar la visita al apartado de Tenerife ?gesto que no pasó inadvertido-, y donde el presidente del Cabildo, Ricardo Melchior, incluso le hizo esperar para demostrar quizás que en esa parcela mandaba más él. Cosas de Fitur y sus protocolos en un día donde también Olarte, Perestelo, Paco Santiago y Claudina Morales, entre otros muchos, aprovecharon para “vender” mediáticamente sus orígenes. Y tengan por seguro que si no hay oferta, jamás llegará la demanda.

Federico Utrera