Cuentan testigos de los lamentos del Gondolero Mayor que esos anuncios de nuevas comparecencise judiciales los hace con esa carita de ángel que él pone de no haber roto nunca un plato sin el consentimiento y conocimiento de su inseparable Onalia -“¡Pues fue Jorge quien trajo a Antón, ¿quién iba a ser si no, Paco?”-. Las charlas extemporáneas del alcalde ya son conocidas en todo Mogán como las Contramedidas Paquirrín, por aquello de andar ya en campaña estival, poniéndose la venda antes de la herida (judicial). Es la misma cara de niño bueno que puso un día en la Supercomisaría cuando anunció al mundo entero, en plan Scarlatta que a la política no volvía “más nunca”. Por cierto, ¿qué fue del juez Alexis Reyes? ¿Ya abrió el lote Europa? ¿Ha descubierto en él el delito de cohecho?