No ha sentado nada bien al vicepresidente primero del Cabildo de Tenerife, José Manuel Bermúdez, que este periódico se haya hecho eco de una conversación grabada por la Guardia Civil a dos ex concejales imputados en el caso Arona, que le relacionaban en mayo de 2008 con la mercantil inmobiliaria de la familia González Toledo. A las 15:15 de este viernes de revuelo en Santa Cruz entraba en nuestro fax una solicitud de Derecho de Rectificación que nosotros, de inmediato, hemos dado curso sin esperar a los tres días que establece la Ley 2/1984, para que no nos tilden de mortificadores. Sin comentarios ni apostillas, la tienen ustedes debajo mismo de estas líneas. Pero no nos resistimos a valorar la pretensión del presidente local de CC en la capital tinerfeña, que pide rectificar a un periódico cuando, en justicia, debería dirigirse al lengüino compañero de filas en Arona, Juan José Alayón, para que la Guardia Civil corrija sus afirmaciones a otro que viste y calza, Sebastián Martín, de que Bermúdez “poseyó entre 2001 y 2007” y no “posee” el 5% de la sociedad en cuestión.