Vuelve este miércoles a sede parlamentaria el caso sobrina, es decir, el intento frustrado de Paulino Rivero de convertir a su sobrina en agente de la Policía Local de Arona. El asunto se debatirá en la Diputación Permanente de la Cámara, el máximo órgano fuera del periodo de sesiones, donde el PSOE quiere que comparezca el presidente para que de la explicación que hasta ahora no se ha dignado ofrecer públicamente desde que se conociera su sabrosa conversación con el alcalde de Arona, su correligionario Berto González Reverón. Todo apunta a que la mayoría de CC y PP denegará esa petición socialista, lo que remitirá cualquier tipo de aclaración presidencial al primer pleno del nuevo periodo de sesiones, es decir, a la última semana de septiembre, dado que la Cámara está en obras y no habrá sesión plenaria hasta entonces.