Aquel episodio de Marcos Brito anunciando que renunciaba a ser alcalde a comienzos de este mandato quedó plenamente recogido en las actas del pleno inaugural. Y la constatación de que la renuncia fue cierta se encuentra en que todos los concejales de CC votaron en aquella ocasión a la número dos de la candidatura, Sandra Rodríguez. La Ley Electoral sólo permite que sean candidatos a alcalde los cabezas de lista de cada candidatura, a no ser que éstos renuncien de modo efectivo, como fue el caso. Falta ahora saber si esa renuncia comprende todo el mandato (2007-2011) o si se le puede considerar solamente flor de un día. Para mejor proveer, los concejales socialistas insistieron mucho este martes en que el secretario de la Corporación hiciera constar fehacientemente en el acta su voto contrario a la elección de Brito como alcalde al no considerarlo elegible bajo ningún concepto.