Pues sí, José Alcaraz, el portavoz socialista en Telde, volvió a la carga con el asunto de la sentencia de La Mareta este pasado viernes, en el transcurso del pleno del Ayuntamiento, y más concretamente en el apartado de ruegos y preguntas. Alcaraz volvió a preguntar a la alcaldesa, María del Carmen Castellano, por esa extraña operación, a la que le puso reparos el interventor pero que, de buenas a primeras, caminó con todos los plácets gracias a un informe que emitió nada menos que el impoluto José Luis Mena, el jefe de Urbanismo, dechado de virtudes morales y administrativas, como todo el mundo sabe. Pero a Alcaraz no le contestó nadie, hubo silencio, como al parecer es norma habitual en los plenos cuando la oposición pregunta, en aplicación de los cinco días que tiene el grupo de gobierno para contestar. El portavoz socialista preguntó por los beneficios que pudiera obtener el consistorio pagando esos 13,2 millones a Ambrosio Jiménez por una vía que reporta unos intereses bancarios de seis millones de euros que hay que sumar a los 3,2 de lucro cesante que fijó la sentencia tras desbaratarse la operación de venta de esa parcela de La Mareta realizada por el siempre genial Guillermo Reyes. Una “factura” que forma parte de otras muchas que terminan sumando nada menos que 72,5 millones. Es decir, que el embolado Ambrosio se lleva el 25% del total del pago a proveedores de la ciudad de Telde. Al menos una explicación merece el asunto, y no ese silencio cómplice que todo lo empuerca siempre.