Crítica social e institucional a través del arte de 16 jóvenes

El Gabinete Literario de Las Palmas de Gran Canaria ha sido el lugar elegido para acoger la exposición Creación crítica y mercado: aportación de significado y valor, impartido por el colectivo artístico PSJM. Tras varias ediciones de estos talleres de verano en el Instituto Cervantes y la galería White Concepts de Berlín, desde donde operan, este año se han trasladado por primera vez a la capital grancanaria, gracias al apoyo de la Fundación Disa.

Cynthia Vera y Pablo San José, los integrantes del colectivo, han ejercido durante un mes de profesores de un total de 16 alumnos de Gran Canaria, Tenerife y Barcelona, que han sido seleccionados entre los muchos candidatos que lo solicitaban, para recibir un curso intensivo de cuatro semanas en el propio Gabinete. Asegura Vera que en un principio las plazas totales eran 15, pero dada la alta demanda de solicitudes, ampliaron el cupo, admitiendo a un alumno más.

Durante estas cuatro semanas del mes de julio, los alumnos recibieron clases de teoría y crítica institucional, creación colectiva y análisis crítico, además de lecciones de márketing para autónomos. Según Vera, existe una deficiencia dentro del sistema universitario, pues, afirma, “normalmente se enseña mucha técnica, pero casi todos los que se van a dedicar a esto profesionalmente acaban siendo autónomos, y no saben cómo emitir una factura, promocionarse o incluso organizar su trabajo”.

Explica Vera que antes de comenzar el workshop, establecen los cuatro grupos que finalmente tendrán que exponer sus proyectos. Estos grupos, formados por los 16 alumnos provenientes de distintas ramas de Humanidades y Bellas Artes, son por esta misma razón heterogéneos, donde cada uno puede trabajar aportando su fuerte. En las primeras semanas reciben clases teóricas para luego empezar a trabajar en su identidad grupal, creando su logotipo y su statement como colectivo, y así en las últimas semanas empezar a producir y montar la exposición, tras un brainstorming previo en que tendrán que contar con el aprobado de Vera y San José. Lo que se pretende, aseguran, es fomentar es la persecución de un producto artístico común, a partir de la cooperación y colaboración entre los distintos grupos.

El proyecto final, que en las ediciones pasadas en Berlín se exponía ante comisionarios internacionales, se presentó esta vez ante los directores del Centro de arte La Regenta, Alejandro Vitaubet y del CAAM, Orlando Brito Jinorio, que aplaudieron el trabajo realizado por los jóvenes.

La exposición

El grupo Identidad Colectiva presenta la instalación Contraespacios, que consta de un espejo al final de las escaleras principales del Gabinete y una foto de una de las escaleras del Risco de San Nicolás, que, reflejada en el espejo, crea una sensación de continuidad entre ambas. Con esta obra pretenden reformular los márgenes que separan territorios y sociedades. El grupo Krater, con su obra Paisajes prohibidos, expone una serie de fotografías aéreas de la zona militar de La Isleta, mostrando las ruinas y territorios militares que hoy en día siguen siendo inaccesibles para la ciudadanía.

Por su parte, el colectivo Mil Leches, a través de su empresa ficticia SOS Support&Services, nos invita a reflexionar sobre la multiplicación de las barreras entre países debido a la migración masiva. A través de SOS Support&Services, ofrecen packs de camuflaje para transformar a los inmigrantes en turistas, y que así consigan su total integración en la sociedad. Por último, el grupo Opuestos presenta su instalación llamada Green Shots, a través de la que plantean la intervención en los llamados no-lugares, es decir, lugares inhabitados y abandonados, para intervenirlos de forma ecológica, y que así se transformen y dejen de tener el significado de un vacío urbano. En la instalación que han construido en la Sala de Arte Social, se disponen cuatro montañas de tierra sobre las paredes, y encima de ellas fotos de estos no-lugares.

La exposición, que fue inaugurada el pasado viernes, se podrá visitar en el Gabinete Literario, en la plaza de Colón, hasta el próximo 30 de agosto.