El dulce sabor de la venganza de Dave Carroll
¿Cuantas veces se ha sentido usted impotente ante una situación de abuso mientras notaba que se reían delante de sus propias narices? Así se sintió Pau Donés, de Jarabedepalo, cuando recogió su guitarra Ovation después de facturarla con Vueling y vio que se la habían destrozado y no le daban ninguna solución salvo el consabido 'agua, ajo y resina' (aguantarse, a joderse y resignarse).