Irán y Estados Unidos se reúnen tras más de dos décadas sin relaciones
El embajador de EEUU, Ryan Crocker, y el iraní, Hasan Kazemi, celebraron una entrevista a puerta cerrada en la que se limitaron a discutir sobre la situación de la violencia en Irak, sin referencias a las gélidas relaciones bilaterales o al programa nuclear iraní. Sin embargo, el encuentro entre el “gran Satán”, como llama Irán a EEUU, y el miembro del “eje del mal”, como define Washington a Teherán, supone un hito en más de dos décadas sin reuniones oficiales directas.
Fuentes iraquíes cercanas a la reunión, que prefirieron no ser identificadas, informaron de que los representantes iraníes avisaron a EEUU de que “el cambio en su política hacia Irán, incluido su apoyo a los grupos opositores que intentan derrocar al régimen, es la clave para mejorar las relaciones entre los países”. El Gobierno iraquí observa con relativo optimismo las conversaciones, con la confianza de que sirvan para abrir un resquicio a la esperanza de acabar, o al menos aliviar, la matanza diaria de civiles.
El primer ministro iraquí, Nuri al Maliki, abrió con un discurso la entrevista, que tuvo lugar en su oficina de la fortificada “zona verde” de Bagdad. Maliki expresó su confianza en que la reunión fuese “positiva, transparente y conlleve un alto grado de responsabilidad”.
Tras su intervención, Maliki abandonó el lugar de la reunión y dejó al asesor de Seguridad Nacional, Muwafak al Rubeiei, como representante de su Gobierno en las conversaciones.
Modificación de una “política errónea” en la zona
En cualquier caso, los analistas en la región coinciden en dar una gran importancia al resultado de la reunión, que puede marcar la senda de las futuras relaciones entre ambos países.
Para Hashim Hasan, profesor de la Universidad de Bagdad, Irak será la víctima de cualquier resultado de las conversaciones, porque tanto EEUU como Irán persiguen su propio interés más que el de Irak. “Las negociaciones serán productivas en función de lo que cada país esté dispuesto a avanzar en sus concesiones para alcanzar un compromiso”, aseguró Hasan en declaraciones a la televisión oficial iraquí.
Sin embargo, la reunión llega en un momento de constantes críticas recíprocas entre Irán y EEUU por su papel en Irak. Aproximadamente a la misma hora en que se celebraba la reunión en Bagdad, el ministro iraní de Asuntos Exteriores, Manuchehr Mottaki, exigía en Teherán a Estados Unidos que “cambie su política errónea en Irak”.
“Esperamos que EEUU adopte una postura correcta respecto a Irak, admita que su política en ese país y en la región ha fracasado y decida cambiarla en favor del éxito y la continuidad del diálogo”, recalcó. El régimen de los ayatolás también acusó recientemente a Washington de estar creando una red de espías con la misión de preparar sabotajes en la frontera entre Irak e Irán.
Por su parte, la semana pasada, el presidente estadounidense, George W. Bush, pidió el endurecimiento de las sanciones contra Irán por su programa nuclear y “sus desafíos al mundo libre”. Además, Washington ha acusado en varias ocasiones a Teherán de proveer con armamento pesado a las milicias chiíes que operan en Irak e incluso a los insurgentes suníes.
La entrevista de este lunes es el primer contacto a alto nivel entre Estados Unidos e Irán desde que ambos países rompieron sus relaciones el 7 de abril de 1980 por la llamada “crisis de los rehenes”. Más de medio centenar de estadounidenses permanecieron cautivos durante 444 días en su embajada en Teherán entre noviembre de 1979 y enero de 1981, después del derrocamiento del Sha Mohamed Reza Pahlevi y la instauración del régimen islámico de los ayatolás.