Hoy quiero felicitar al Ayuntamiento de Hermigua por seguir apostando por la cultura y por promocionar estudios de historia local. Este viernes, en la Casa de la Cultura municipal, a las 20:00 horas, será presentado un libro que –estoy seguro- marcará un antes y un después en nuestro conocimiento del municipio norteño. La memoria de un pueblo, título del trabajo, no puede ser más revelador: mi querido y admirado amigo historiador Ricardo Valeriano ha puesto en sus páginas todo su conocimiento para explorar un periodo fundamental de la historia de Hermigua a través de las actas del Ayuntamiento entre 1890 y 1975. No conozco mejor persona para llevar a cabo tan ingente trabajo. Porque, qué duda cabe, hablamos de un momento de formación de lo que es el municipio hoy en día. En este libro está todo y muy bien escrito porque no sólo Ricardo es historiador, sino que además sabe contarlo. Los datos no son sólo los que construyen una historia, sino son las palabras, perfectamente engarzadas, las que nos acercan e invitan a sumergirnos en este apasionante libro. Además, estará presentando por un ilustre hijo de esta isla, una persona docta cuya pluma nos ilustra frecuentemente: Oswaldo Izquierdo. Desde aquí, vaya por delante mi enhorabuena tanto al autor como al Ayuntamiento. Allí estaremos porque, como aquella canción trovadoresca, soy tan preguntero, / tan comilón del acervo / que marchito si le pierdo / una contesta a mi pecho.