Endesa reduce un 25% los tiempos de respuesta ante incidencias en la red eléctrica en los últimos cuatro años
Endesa a través de e-distribución, su filial de Redes, ha logrado en 2023 una notable reducción de los tiempos de desconexión a clientes ante incidencias en la red eléctrica, reduciendo los tiempos de intervención en un 15 por ciento en el último año. Por lo que el tiempo medio en minutos de desconexión quedó establecido en 48 minutos durante 2023, frente a los 64 minutos registrados en 2020, los 63 minutos en 2021 y los 57 en 2022. Estos datos sitúan la reducción en los tiempos de interrupción en un 25 por ciento en apenas cuatro años destacando como una de las comunidades autónomas donde más rápidamente han bajado los tiempos de atención ante las averías en la red eléctrica de media tensión, informa la entidad.
Este dato tan positivo obtenido en el Tiepi, denominación oficial utilizada a nivel nacional para medir el tiempo de interrupción equivalente de la potencia instalada en media tensión, responde a varios factores entre ellos la alta inversión realizada por Endesa en la digitalización de las redes, fijada en 26 millones de euros en Canarias en los últimos tres años, una reducción en las averías en un 14 por ciento durante 2023, menos eventos meteorológicos adversos y la labor de los técnicos de e-distribución a la hora de extremar las medidas en el cumplimiento de la normativa de Calidad, lo que permite clasificar correctamente los incidentes.
En este análisis de los datos Tiepi se recogen los incidentes propios de la red eléctrica, tales como cortes programados y averías imprevistas, excluyéndose las incidencias de Transporte y Generación. En este sentido, aclarar, por ejemplo, que el cero energético ocurrido en La Gomera el año pasado queda fuera de este cómputo al deberse a un evento fortuito que se generó en las instalaciones de Generación en la isla.
El tiempo de interrupción equivalente de la potencia instalada (Tiepi) es un indicador básico para contabilizar la Calidad de Servicio en España y establece el periodo medio que por cliente se ha generado una desconexión durante un año. Durante el pasado año 2023, Endesa lo ha reducido hasta los 48 minutos para todas aquellas incidencias programadas e imprevistas.
El reto profesional e inversor ha sido elevado en los últimos tiempos, lo que ha contribuido a que se pasara de los 64 minutos de 2020, a los 48 minutos actuales, proporcionando una reducción de respuesta para los clientes del 25 por ciento y que se acentuó positivamente en 2023 respecto a 2022, cuando se pasó de los 57 a los 48 minutos en solo un año.
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