Imparten en la Isla cursos de ‘Marinero Pescador’ y ‘Formación Básica en Seguridad’
El Cabildo de La Palma, a través de la Consejería de Agricultura, Ganadería y Pesca, en colaboración con la Dirección General de Pesca del Gobierno de Canarias, la Sociedad de Promoción y Desarrollo Económico de La Palma (Sodepal) y las Cofradías de Pescadores de la Isla, organiza los cursos de Marinero Pescador y Formación Básica en Seguridad, señala la primera Corporación en una nota de prensa.
Añade que “ambas acciones formativas -indispensables para quienes quieran dedicarse profesionalmente al sector pesquero- se están desarrollando desde el pasado día 4 y se prolongarán hasta el de 28 de julio. Las clases teóricas se están impartiendo en el salón de actos de la Central Hortofrutícola, mientras que las prácticas formativas se realizarán en aguas del Puerto de Santa Cruz de La Palma y en el Campo de Fuego de Barlovento.
El consejero delegado de Agricultura, Ganadería y Pesca del Cabildo de La Palma, José Basilio Pérez, explica que en la tarea pública de acercar la formación náutica profesional obligatoria a la Isla, el Cabildo ha organizado estos cursos, “que tienen como beneficiarios principales a los pescadores profesionales y pretenden garantizar el relevo generacional de los trabajadores del mar”.
A este respecto, Pérez incide en que esta formación organizada por la Institución insular aporta destacados beneficios a los pescadores profesionales cuya actividad elogia el consejero, ya que “garantizan el suministro de pescado diario a nuestra alimentación, ejercen su actividad bajo una amplia y exigente regulación normativa, satisfacen los preceptivos impuestos y tasas y ofrecen empleo en el mar a personas desempleadas”.
José Basilio Pérez destaca que el Cabildo de La Palma ha incluido en su oferta formativa anual estas acciones en torno a la formación profesional marítimo-pesquera, no sólo por el carácter obligatorio de estas certificaciones, “sino también por la elevada demanda para realizar los cursos y el perjuicio económico que supondría para los interesados el desplazamiento a las islas capitalinas”.
“Merece mención especial el Instituto de Formación Profesional Marítimo Pesquero de Santa Cruz de Tenerife por propiciar el desplazamiento de sus profesores y su estrecha colaboración en la organización administrativa del curso”, ha destacado el consejero.
El curso que otorga el título de Marinero Pescador “se exige a todo el personal que ejerce funciones de tripulante subalterno para cualquier servicio en los buques dedicados a la pesca o auxiliar de acuicultura”, se apunta en la nota. Asimismo, “faculta para manejar con fines comerciales embarcaciones de menos de 10 metros de eslora dedicadas a la pesca o auxiliar de acuicultura, que operen exclusivamente dentro de aguas interiores de puertos y tengan una potencia adecuada a la embarcación, y siempre que no transporten pasajeros”. El curso tiene una duración de 23 horas lectivas, 15 de teoría y 8 de práctica.
Por otro lado, la acción denominada Certificado de Formación Básica en Seguridad “se exige a todo el personal que ejerza funciones profesionales marítimas en los buques civiles, así como a aquellos a los que se les confían tareas de seguridad o de prevención de la contaminación relacionadas con las operaciones del buque. Cualquier persona interesada en dedicarse a una actividad económica a bordo de una embarcación (pesca, acuicultura, tripulante de buques de pasaje, buceo profesional, excursiones marítimas…) tiene que realizar obligatoriamente esta acción formativa, en la que se transmiten a los alumnos los conocimientos necesarios para saber actuar ante cualquier circunstancia de siniestro que ocurra en el mar, como lucha contra incendios a bordo, supervivencia en el mar ante naufragio, primeros auxilios, prevención de riesgos laborales, etcétera”. El curso está dirigido a 20 alumnos, siendo su duración de 70 horas, comprendidas en el periodo del 11 al 28 de julio, de las cuales 45 son teóricas y 25 prácticas.
José Basilio Pérez asegura que el Cabildo “seguirá apostando por garantizar esta formación mínima imprescindible y desea que los beneficiarios de esta acción formativa que carezcan de empleo, pronto lo obtengan y solicita la colaboración a las empresas del ámbito marino para ofrecer una oportunidad laboral a estas personas recién formadas”.
