Islas espera la licencia de Aena para volver a volar
La Administración Concursal de Islas Airways, que recae en Dictum Abogados, afirma que los trabajadores no pueden cobrar sus salarios atrasados, por prohibición legal, desde que el 14 de diciembre entrara en vigor el concurso de acreedores.
La Ley Concursal establece que todas las deudas de la empresa quedan aplazadas hasta que se fije una forma de pago, con la excepción de los treinta días anteriores a la declaración del concurso, hecho que ya se ha producido.
La Administración Concursal reconoce, en una nota, que la empresa dispone de “liquidez” para afrontar los pagos, pero la ley impide realizarlos para no “discriminar” a unos acreedores frente a otros. No obstante, “cuando se pague a los acreedores de Islas Airways, los trabajadores tendrán un privilegio en el orden de cobro”, explica.
Sin embargo, las deudas generadas por la empresa en concurso desde la fecha de declaración reciben un tratamiento diferente, pues la Ley Concursal sí establece que deben pagarse normalmente. Por este motivo, los trabajadores han cobrado regularmente sus salarios devengados desde el 14 de diciembre.
Asimismo, la Administración Concursal informa de que la aerolínea está “a la espera” de que AENA reactive las licencias de vuelo para retomar su actividad ya que cuenta con la capacidad técnica y económica necesaria y es “previsible”, incluso, que se produzca contratación de personal de forma “gradual”, puesto que poco antes de solicitar el concurso acometió una reducción de plantilla importante a través de un Expediente de Regulación de Empleo (ERE).
Suspensión temporal
El ERE se produjo al suspenderse temporalmente la actividad de la compañía, y ya entonces se previó un derecho de contratación preferente de los trabajadores afectados para el momento en que la compañía volviera a volar y necesitara aumentar su plantilla.
La Administración Consursal señala que ha realizado un “gran esfuerzo” para que la compañía retome su actividad apoyada por el Juzgado de lo Mercantil Número 1 de Tenerife, cuya “rapidez y eficacia” han resultado “cruciales” para la “buena marcha” del concurso de acreedores.
