Un operario de limpieza de la capital grancanaria, sancionado por ''hacer su trabajo''
El Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria ha sancionado a un operario del servicio municipal de Limpieza Viaria por “hacer su trabajo”, según denunció este jueves la sección sindical de Co.bas. en el Consistorio capitalino. La organización sindical asegura que la penalización al compañero, por exceder la velocidad permitida, es injustificada, a la vez que reprocha al responsable del Área de Desarrollo Sostenible su falta de “sensibilidad” y “respeto” hacia el personal de Limpieza.
El trabajador municipal, que cuenta con un expediente laboral “intachable” en sus 18 años de antigüedad, ha sido sancionado con 15 días de suspensión de empleo y sueldo por circular a 103 kilómetros por hora en una vía de 80. Un exceso de velocidad, según alega el sindicato, motivado a raíz de “una llamada de emergencia de la Policía Local” para que el servicio de Limpieza retirase de la vía pública unos cascotes desprendidos de una fachada tras la intervención de los bomberos. Además de la sanción laboral, el operario también recibió la correspondiente multa de Tráfico.
La sección sindical considera injusto “sancionar dos veces, vía administrativa y vía disciplinaria a un trabajador por realizar su tarea diaria que es la retirada de trastos y apoyo al personal de a pie, y al mismo tiempo estar atento a la emisora por si surge imprevisto para atenderlos en la brevedad posible”. Así mismo, critican al gerente del Área de Desarrollo Sostenible, José Marrero, por no dar al trabajador ni “la oportunidad de defenderse”, ni interceder ante la Jefatura Provincial para justificar las razones del exceso de velocidad.
En definitiva, sostiene el sindicato, “la sensibilidad política con el personal de limpieza viaria no parece ser una prioridad de este Ayuntamiento, al contrario, los trabajadores de este servicio tenemos la impresión que lo que se intenta es desacreditar al mismo”.
Así las cosas, la sección sindical de Co.bas. demanda al gerente del servicio municipal que “retire la sanción y restituya al trabajador”, a la vez que insta a la intervención del alcalde como máximo reposable del personal municipal. “Sería un acto de derecho y de justicia”, concluye.
