Pérez habla de propuestas “por definir” y “riesgos” en los nuevos partidos
El secretario general del PSOE en Canarias, José Miguel Pérez, ha cuestionado este lunes la utilidad de las listas electorales asociadas a movimientos sociales como el 15-M, cuya irrupción cree que entraña “riesgos”, entre otras cosas, por ser formaciones “cuya propuesta está por definir”.
“Hasta ahora hemos escuchado mucho populismo y nosotros, al populismo, no le tenemos ninguna simpatía, ninguna. Ni al populismo de la derecha ni a otros populismos”, ha argumentado Pérez.
El dirigente socialista ha expresado este parecer al ser preguntado por cómo cree que repercutirá en las expectativas de voto de su partido en las elecciones de 2015 la presencia de esas nuevas formaciones, que ha admitido que serán rivales suyos, aunque recalcando que entiende que su opuesto “natural” es “la derecha”.
Desde ese planteamiento ha dicho que, más allá se evaluar las opciones de otros, “el Partido Socialista lo que tiene que hacer es recuperar la confianza a base de hacer su propia propuesta”.
Una propuesta que ha sostenido que debe tener el objetivo de “dar un giro de 180 grados en las políticas de empleo y en las políticas económicas” y que se sustenta con “cuestiones muy concretas, y no con apelaciones a las nubes que después no tienen agua, sino con realidades, con medidas reales”.
“Porque yo, hasta ahora, lo que he escuchado son ideas, pero no he escuchado medidas concretas que se puedan llevar a la práctica” por parte de las nuevas siglas electorales, ha apostillado.
Pérez, que ha hecho estas declaraciones a preguntas de periodistas tras un acto al que acudió como consejero de Educación autonómico, ha insistido en que, “en todo caso, esto está por sedimentar y veremos cuál es el sedimento que tiene”, y que, aunque, “de momento, es una opción respetable, como no puede ser de otra manera”, tiene “riesgos”, porque “se han visto en otros sitios”.
Ejemplos de ello son, a su entender, los casos de Francia, donde ha indicado que “acaba de ganar las elecciones europeas un populismo de la extrema derecha”, y de “las penúltimas elecciones italianas, que ganó un populismo que venía con el disfraz de la izquierda y que ha durado lo que ha durado”