El Supremo anula la circunvalación de Arrecife
El Tribunal Supremo (TS) ha ratificado una sentencia anterior del Tribunal Superior de Justicia de Canarias (TSJC) de 2010 que anula el proyecto de la duplicación de la carretera LZ-1 en el tramo Circunvalación Arrecife-Tahiche, en Lanzarote.
El Supremo da la razón a un grupo de vecinos que habían impugnado esta obra y al considerar que el proyecto carece de Declaración de Impacto Ambiental y no se respetó el derecho a la participación pública de los ciudadanos. Ambos fallos estiman el recurso presentado contra la resolución de la Consejería de Infraestructuras, Transportes y Vivienda de 12 de septiembre de 2006, por el que se aprobó la duplicación de dicha vía de Lanzarote en el tramo LZ-3 que abarca casi cuatro kilómetros.
Pese al contundente contenido de la primera sentencia la Consejería no paralizó las obras “ante el grave perjuicio que se ocasionaría con ello a los usuarios de la vía”. El Supremo ahora considera que efectivamente esta obra precisaba de una Declaración de Impacto Ambiental (DIA) y no únicamente de un estudio, como el que fue aportado.
El quid de la cuestión radicó en que la vía no sólo había sido proyectada para el paso de vehículos sino que también contenía numerosos elementos para los peatones. A partir de aquí era necesario acondicionar las velocidades máximas de los vehículos, dimensiones de las aceras o nivel de ruido, entre otros aspectos. Además, se considera que dada la envergadura dé la vía hubiese sido necesaria la redacción de un Plan Especial Territorial. Otro tanto ocurre con la obligación de someter el proyecto a información pública que sólo se cumplió una vez emitida la primera sentencia.
La duplicación del tramo Arrecife -Tahiche se incluyó en el Convenio de Colaboración en Materia de Carreteras suscrito entre el Gobierno de Canarias y el Ministerio de Fomento. Las obras, cuyo presupuesto asciende a 16.433.737 euros, y fueron adjudicadas a la UTE compuesta por Dragados y Horinsa. Las expropiaciones derivadas de la ejecución de esta vía han costado unos 12 millones de euros. El proyecto constituye, básicamente, una duplicación de la calzada actual en una longitud aproximada de 3,6 kilómetros.
El tronco de la nueva carretera coincide con la traza de la actual, con leves fluctuaciones para adaptarse a las condiciones del entorno. La nueva vía contemplaba dos calzadas de 7 metros de ancho cada una, mediana de tres metros, arcenes exteriores de 2 metros e interiores de un metro; y aceras de cinco metros.
