Más de 30 voluntarios investigan el impacto de los microplásticos en las playas de Canarias

Más de 30 voluntarios han participado este sábado en la limpieza del litoral de la playa de Antequera, en Santa Cruz de Tenerife, acción que forma parte de un proyecto europeo que coordina la Universidad de La Laguna y que analiza el impacto de microplásticos y contaminantes emergentes en las playas de la Macaronesia.

Una nota del Ayuntamiento de Santa Cruz indica que este trabajo se enmarca dentro del proyecto de investigación que coordina la ULL IMPLAMAC, que evaluará hasta 2022 el impacto de los microplásticos y contaminantes emergentes en costas de la Macaronesia.

Al respecto, Javier Hernández Borges, investigador principal, explica que el proyecto comenzó en octubre de 2019 y finalizará en septiembre de 2022, aunque es posible solicitar un año de prórroga.

Informa de que el objetivo principal es la creación de un observatorio que genere datos cuantitativos y cualitativos del impacto que tienen los microplásticos y los contaminantes emergentes en las costas de los archipiélagos de Canarias, Cabo Verde, Madeira y Azores y contribuir a la mejora del conocimiento público en materia de contaminación por plásticos, incluyendo la sensibilización de la población.

La playa de Antequera se ha incluido entre las que se van a analizar, puesto que reúne los requisitos para el muestreo, y es de las pocas playas con esas características que se encuentran en esa zona de la isla, indica la nota informativa.

Además, se sitúa dentro de un Espacio Natural Protegido, el Parque Rural de Anaga, además de formar parte de la Red Natura 2000 (tanto como Zona de Especial Conservación como Zona de Especial Protección para las Aves) e incluirse dentro de la Red Canaria de Reservas de la Biosfera.

Según el Ayuntamiento, la orientación de esta playa la protege ante la llegada de grandes cantidades de microplásticos.

Los estudios realizados hasta la fecha muestran que las playas de Canarias que más microplásticos reciben son aquellas con una orientación nor-noreste, pero dado que hasta la fecha no existen datos que avalen esta hipótesis, es necesario conocer el estado de este enclave para también aportarle la mayor protección posible.

Las playas objeto de este proyecto serán escenario de la monitorización de microplásticos y deben cumplir una serie de requisitos como tener arena durante la mayor parte del año, estar expuestas al mar abierto y tener al menos una longitud de 100 metros.

Esta acción junto con una campaña de sensibilizaión y concienciación en la playa de las Teresitas han sido programadas por el Ayuntamiento con motivo del Día Internacional de las Playas.