''Algunos niños no soportarán el traslado''
La decisión de cerrar el último día de este año la Unidad de Cirugía Pediátrica Infantil del complejo hospitalario Materno Insular de Gran Canaria ha sentado como una bomba en el servicio. Pedro Suárez, jefe de la unidad de Cardiología Pediátrica Materno, se ha mostrado indignado por la decisión y ha advertido del peligro que supondrá el traslado de sus pacientes: bebés y niños de hasta 14 años, que podrán padecer graves secuelas o temer incluso por sus vidas.
La decisión fue comunicada por la gerente del complejo Hospitalario Materno Insular, María Isabel Gutiérrez, la semana pasada, y según su versión, por la política de reducción de costes y por la disminución de casos atendidos en los dos últimos años. Según la Consejería de Sanidad, para mantener abierta la unidad deberían realizarse 250 operaciones al año y actualmente no se realiza ni la cuarta parte.
Los especialistas advierten de que pueden presentarse diferentes casos: los programados, los casos urgentes, fundamentalmente recién nacidos y los no nacidos. En estos últimos casos, la consejería plantea que se desplace la madre hasta una ciudad que disponga de un centro de referencia y que resida en ese lugar hasta que se produzca el parto, teniendo que sufragar los gastos de mantenimiento en esa ciudad hasta que el niño sea atendido y pueda volver a casa.
En referencia a los traslados, Pedro Suárez opina que “los familiares de los pacientes sufrirán situaciones de estrés, al tener que interrumpir su trabajo y costear su estancia fuera de Canarias, a veces larga, aunque luego reciban las dietas a la vuelta, que consisten en 50 euros al día.” Para el jefe de la unidad, se trata de una merma de una prestación que los especialistas consideran esencial.
Además, estos traslados se llevarán a cabo en el único avión medicalizado con el que cuenta el Servicio Canario de Salud. Se trata de un avión de hélices bastante antiguo que debe repostar en Sevilla porque no tiene autonomía para llegar hasta Madrid o Barcelona. Fuentes cercanas al servicio informaron a CANARIAS AHORA que el coste del vuelo de este avión es de 18.000 euros aproximadamente.
Suárez mostró su preocupación ante la situación creada ya que “hay muchos niños que ahora están bien precisamente por la inmediatez con la que se han tratado”. El jefe jefe de la unidad de Cardiología Pediátrica, consternado, añade que “algunos niños no soportarán el traslado”.
“Esto no es nuevo, ya lo vivimos hace algunos años con dramáticas experiencias. Se vuelve doce años atrás con los medios de hace veinte”, puntualiza.
Según ha sabido CANARIAS AHORA, los casos programados dejarán de operarse a partir de la tercera semana del mes de noviembre. La unidad de cirugía cardiaca pediátrica operará solo las urgencias desde la tercera semana de noviembre hasta el 31 de diciembre.